Al Pozoblanco no le queda otra opción que ganar para no descolgarse definitivamente de la lucha de estar en los puestos de play off, aunque ya no depende de sí mismo. Para seguir en esa batalla, los de Alberto Fernández tendrán que ganar la primera de las tres finales que tienen ante sí, la que le mide al Conil (jueves, 12:00 horas) en la jornada intersemanal. 

Tras la derrota en Utrera, los pozoalbenses ocupan la sexta posición y por eso no piensan en otra cosa que no sea sumar los tres puntos ante el conjunto gaditano. «Es un partido que es una final, con nuestra gente y ante un equipo peligroso que su calidad no se ve reflejada en la posición que ocupa en la tabla», indicó el preparador de los pozoalbenses. Y es que el técnico daba al cuadro gaditano a principio de temporada como «uno de los favoritos para estar entre los cinco primeros clasificados». 

No es así, pero no da ninguna tranquilidad a Alberto Fernández que incidió en que «tiene grandísimos jugadores que hay que tener en cuenta» para que los suyos no caigan derrotados. Porque en la mente del equipo vallesano únicamente hay una opción: ganar. «Queremos quitarnos la espina del Utrera, creo que merecimos mucho más, pero son cosas que pasan», aseguró Alberto Fernández. 

Una victoria que permita «presionar» a nuestros rivales y esperar porque «somos conscientes de que ya no dependemos de nosotros mismos», pero «si hacemos partidos como venimos haciendo las últimas semanas, tenemos opciones».