No sabemos si habrá más reacciones, pero la cancelación por parte del alcalde de Torrecampo, Francisco Carlos del Castillo, del homenaje a Florián Andújar, vecino de la localidad muerto cuando combatía en Francia contra las tropas nazis, vivió en el día de ayer un capítulo más. Así, la Asociación «Los Pedroches por la República» valoró la situación creada durante esta semana y catalogó de «inciertas» las razones esgrimidas desde el Ayuntamiento para la cancelación del homenaje.

El presidente de la asociación, Juan José Pérez Zarco, que también es presidente de la mencionada asociación, tachó de «indignidad» el agravio cometido con Florián Andújar y sus familiares. Pérez Zarco se dirigió al alcalde al que invitó a recordar que «llevábamos varios meses trabajando juntos, que éramos conscientes de los escollos ideológicos que debíamos sortear a la hora de redactar el proyecto; recuerde que le felicitamos hasta en tres ocasiones por una actitud que consideramos valiente y sin prejuicios».

Según la versión dada por uno de los promotores del homenaje, la actitud del alcalde viró el pasado lunes y después de que el primer edil negase esas presiones, Pérez Zarco leyó un mensaje donde el primer edil exponía que «el asunto está tomando unos derroteros que jamás pensé y el ambiente en el pueblo se va calentando por momentos, algo que no puedo permitir». Además, en los mensajes y las conversaciones posteriores se daba la oportunidad de realizar ese homenaje pero sin personalizarlo y ampliarlo a todos los «torrecampeños que han llevado, llevan y llevaran su nombre más allá de nuestras fronteras», algo que para los promotores del proyecto «era desvirtuarlo».

Ante esta situación, Pérez Zarco pidió al alcalde de Torrecampo que «en beneficio de la inteligencia busquen otros argumentos porque decir que IU ha politizado esta cuestión es una mentira, una desvergüenza y desvirtuar la realidad», a la par que pidió que «les ruego que admitan su torpeza en este asunto porque mientras en Francia nuestros paisanos reciben las más altas condecoraciones, en su pueblo se buscan excusas y mentiras para suspender un homenaje».

Por su parte, el vicepresidente de la asociación, Miguel Calero, catalogó el hecho de «muy grave» puesto que «un alcalde como máxima autoridad no se puede dejar intimidar por ninguna persona y si ha sido así tiene que ponerlo en conocimiento de la justicia». Además, profundizó en el hecho de que un decreto de alcaldía no se cumpla sin una motivación justificada, sino de manera arbitraria.