Adiós a las jornadas en blanco para el Club Deportivo Pozoblanco después de que en la tarde de ayer lunes comenzara la pretemporada bajo la dirección de Antonio Jesús Cobos. Llegó la primera toma de contacto para un equipo que parece finiquitado y al que se sumaron también jugadores sin ficha que harán la pretemporada con el equipo. De los fichados y los renovados no faltó nadie a la cita en un primer entrenamiento que tendrá continuidad el resto de días de la semana puesto que tocará trabajo intenso en este inicio para cumplir con la planificación prevista. 

Las ganas fueron el ingrediente de una sesión a la que los jugadores llegaron en unas condiciones óptimas. «Había muchas ganas de empezar, estos días son especiales más después de un año difícil para todos. Los jugadores han llegado bien, no hay ninguno que haya llegado pasado de peso y eso es importante», apuntó el técnico a la conclusión de esa primera sesión de trabajo. Un entrenador al que le hubiera gustado que tras los primeros días de trabajo su equipo se probara en el primer test este fin de semana, pero un arranque tardío ha impedido ese hecho y el Pozoblanco no jugará hasta el 11 de agosto su primer amistoso, que será frente al Montilla. 

«Hemos intentado buscar un partido, pero no ha sido posible, pero bueno estos días son para conocernos, para intentar que no haya ninguna lesión y para que los jugadores vayan cogiendo minutos en las piernas», explicó. Entre todos los jugadores que acudieron a esa primera cita se vieron futbolistas que no tienen ficha con el primer equipo, pero que estarán durante la pretemporada como Medina, Aitami, Moro, Rafa Ariza o Víctor Piochi. «Queremos que los jóvenes estén, Medina creo que tendrá ficha y luego nos queda una para completar la plantilla», especificó un técnico que dejó muy claro lo que necesita para completar su equipo. 

En este sentido, Cobos señaló que quería un jugador de banda, un extremo y dicho y hecho porque el club ha anunciado hoy mismo el fichaje de Diego Gámiz, un extremo que llega procedente del Lincoln Red Imps F.C. con el que jugó la pasada temporada la Gibraltar National League. El futbolista acumula experiencia en equipos como el Antequera, el Loja o el Algeciras. Gámiz fichó por el Real Jaén en el mes de julio pero la crisis institucional por la que atraviesa el club provocó que el futbolista dijera adiós a este proyecto deportivo. 

Una plantilla joven

Con la llegada de este fichaje se daría por cerrada la plantilla, según los cálculos de un técnico que aseguró que «estamos contentos, son jugadores que querían estar aquí, si bien es cierto que no nos podemos poner delicados». Y es que la cuestión económica ha primado por eso el club «tiene que ofrecerle otras cosas, en este sentido tenemos una plantilla joven con futbolistas que van a tener su oportunidad y minutos. Estamos contentos porque son jugadores que querían estar aquí».