El pasado 30 de abril, en el contexto de uno de los plenos ordinarios celebrados en el Ayuntamiento de Pozoblanco, el conflicto que se mantiene con la Policía Local dio un paso más cuando el alcalde, Pablo Carrillo, avanzó que consultaría a los servicios jurídicos para determinar las acciones que se podrían emprender ante lo que consideraba un «abuso» y una entrada en «insultos personales». Unas declaraciones que se llevaron a cabo tras los episodios vividos en la última edición de la Feria Agroganadera donde las protestas alcanzaron su punto más álgido.

Pues bien, las intenciones de Pablo Carrillo no se han quedado ahí, y tal y como indicó en aquella ocasión, ha hecho firme su decisión de consultar a los servicios jurídicos que asesoran al Ayuntamiento para emprender acciones legales. Según ha podido saber www.hoyaldia.com ya se ha interpuesto una denuncia contra la Policía Local, un hecho que hace unos instantes confirmaba el propio Carrillo a este periódico.

«Se ha interpuesto una denuncia por lo que entendemos que son calumnias, insultos y las formas por las que se optan para protestas, que creemos que no son las más adecuadas por lo que hemos decidido dar este paso porque para eso hay jueces, para que dictaminen», ha expuesto el primer edil pozoalbense que ha asegurado que «hay más denuncias porque así lo confirmaron también los ganaderos». Carrillo ha alegado para tomar esta decisión que «hay que saber hasta qué punto llegan los derechos de cada uno y si se traspasan pues para eso están los jueces».

El conflicto, por tanto, da un paso más y llegará hasta los juzgados tras muchos meses enquistado al estar las dos partes, equipo de gobierno -los encargados de negociar han sido César Bravo y Pablo Carrillo- y la Policía Local, un colectivo que ha aprovechado cualquier ocasión para hacer públicas sus reivindicaciones.