El Boletín Oficial del Estado publica hoy viernes el nombre de 4.427 españoles muertos en los campos de concentración de Mauthausen y de Gusen, en Austria. Una publicación que nace con el objetivo de reconocer a estos españoles víctimas del nazismo. 

El Gobierno ha querido rescatar a estas víctimas, que han permanecido más de ocho décadas olvidadas, hasta que el Gobierno las sacó hace unos meses de un archivo para, una vez cotejadas, inscribir sus defunciones en el Registro Civil como reconocimiento y reparación moral.

Entre esa larga lista se encuentran ciudadanos de Los Pedroches que perdieron su vida en aquel campo de concentración. Ciudadanos como Ángel Tena Navarrete, Rafael Fiñana Nava, Rafael Fiñana Núñez y Rafael Gil Navarrete, los cuatro naturales de Alcaracejos. O los de Antonio Pizarro Aranda, José Ruiz Ranchal y Rafael Olmo Márquez, todos ellos de Añora. 

Esa lista de la memoria prosigue y en ella quedan plasmados los nombres de Antonio Pizarro Aranda y Antonio Calvo Torrico, los dos de Belalcázar. Emilio Alcalde Giménez es la única víctima natural de Dos Torres, mientras que la lista de hinojoseños es algo más amplia con Dionisio Pérez Gómez, Evaristo Leal Aranda, José Moreno Flores, Lucrecio Torrijos Castillejos, Manuel Aranda Gómez, Miguel Peñas Castillejos, Nicasio Ruiz Cortés y Pablo Nogales Caballero. 

Hasta once víctimas de Pozoblanco aparecen:  Antonio Aguirre Fernández, Antonio Fabios Vélez, Antonio García Gerona, Isidoro Arévalo Rubio, Juan Blanco Guijo, Juan Calero Calero, Juan Espinol Fernández, Juan Guijo González, Juan Rodríguez Merchán, Pablo Muñoz Amor y Ricardo Moreno Lucena. 

Casimiro Romero Estrella y Juan Romero Arroyo de Torrecampo; Juan Capitán Cabrera, Damián Castro Molinero, José Cerro Coleto y José Muñoz Rubio de Villanueva de Córdoba; Lucio Martínez García, Isidoro Oliveras Torres y Manuel Blanco Cámaras de Villanueva del Duque; y Miguel Madueño Orellana de Villaralto. Casi 40 nombres que hablan de otras tantas historias que fueron sepultadas en el campo de concentración. 

Esta iniciativa forma parte de las medidas recogidas en la Ley de Memoria Histórica como agradecimiento y reparación a los más de 10.000 españoles que fueron deportados a los campos de concentración nazis, desprovistos de su nacionalidad española por decisión del gobierno franquista, declarados apátridas y de los cuales más de cinco mil perdieron allí la vida, apunta el Ministerio en su comunicado. Además, los familiares tendrán un mes para presentar alegaciones ante posibles errores.