Lo peleó y luchó hasta el final en un choque de máxima igualdad, pero el Espectáculos Doble A Wop Balonmano Pozoblanco no pudo mantener su condición de invicto tras caer ante el Ikasa Balonmano Madrid Boadilla. Una derrota por la mínima que provoca que los de Pepe Morales caigan hasta la quinta plaza de la tabla clasificatoria, pero que no resta un ápice al buen arranque liguero del conjunto pozoalbense. 

El partido arrancó con dominio de las defensas a lo que se sumaron algunas imprecisiones en ataque que provocaron que los tanteos fueran muy bajos. Tanto es así que el primer parcial se cerró con 1-1, para ser roto posteriormente por Óscar García desde los once metros consiguiendo una ventaja mínima para los visitantes, que no aprovecharon una pérdida de su rival en la siguiente acción para ampliar esa renta. Sin embargo, el gol de ventaja se mantuvo en el segundo parcial (2-3) ya que aunque el portero local estuvo acertado desde los siete metros, el rebote permitió a los de Pepe Morales volver a ver portería. 

A partir de ahí, y a pesar de que el cuadro pozoalbense consiguió el 2-4 se entró en una fase de máxima igualdad que se elevó hasta el marcador y se extendió hasta la conclusión de la primera parte (12-12, m. 30). Hubo más de lo mismo en un segundo acto donde predominó esa igualdad e intercambio de dirección en el electrónico, aunque con rentas mínimas. Con 18-18 en el marcador y pasado el minuto 10 llegó una de las jugadas de mala fortuna para el cuadro pozoalbense ya que Javi García tuvo que abandonar la cancha, aunque volvería minutos después sin que las molestias físicas desapareciesen del todo. 

Visto lo visto, la recta final del choque fue clave para el devenir del mismo y los puntos se quedarían en el casillero del equipo que estuviera más acertado porque la tónica de todo el partido se alargó hasta el final. Con 22-21 se entró en el último parcial, momento en el que los locales se despegaron con un 23-21 que fue rápidamente neutralizado por los de Pepe Morales. Hubo máxima emoción porque de nuevo los dos goles a favor del cuadro madrileño aparecieron aunque el Balonmano Pozoblanco tuvo el arrojo y la capacidad de empatar la contienda a 24. Un gol desde el extremo adelantó de nuevo al Ikasa sin que llegars la réplica en un ataque muy largo que acabó con pérdida del Balonmano Pozoblanco. 

No estaba todavía todo dicho porque los locales tuvieron balón para sentenciar pero su pivote se encontró con Salva Santos. La parada fue clave para una última oportunidad de empatar que llegó tras un tiempo muerto. Se intentó pero no se consiguió ese tanto y finalmente la victoria quedó en tierras madrileñas.