Se acabó el «veranillo» del que veníamos disfrutando en un mes de noviembre con temperaturas atípicas e impropias de estas fechas. La entrada en la Península de una masa de aire polar ha provocado que el frío se instale en nuestras rutinas de manera brusca.

Si durante la semana pasada se disfrutaban jornadas donde las temperaturas máximas alcanzaba y podrían sobrepasar los 20 grados, lo cierto es que desde el sábado esa temperaturas han bajado considerablemente hasta llegar a los 10 grados de máxima y llegando a los 0 en las mínimas.

Según la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) esta situación se extenderá y el frío ha llegado para quedarse, aunque a final de semana las temperaturas máximas podrían subir. Así, a partir del jueves esas temperaturas podrían alcanzar los 15 grados, frente a los 10 de estos días. Las mínimas oscilarán entre los 0 y 4 grados.