El equipo de la UD Belalcázar se llevó ayer un susto después de que el autobús donde viajaba comenzara a arder a la altura del kilómetro 254 de la N-532, según informó la Guardia Civil de Tráfico de Córdoba. Según esa información el autobús quedó calcinado pero afortunadamente no hubo que lamentar heridos y el susto se quedó en los daños materiales.

Los componentes del equipo regresaban a Belalcázar después de disputar el partido correspondiente a la jornada de Primera Andaluza que le midió a La Rambla. Desde la entidad, se utilizaban las redes sociales para lanzar un mensaje tranquilizador explicando que no había ningún herido y que el percance se saldó tan sólo con los daños materiales.

El percance se produjo sobre las nueve de la noche cuando los miembros del equipo se percataron del olor a quemado que procedía de la parte de atrás del autobús. Aunque en un principio intentaron sofocar el fuego con extintores, se llamó al servicio de emergencias 112 desplazándose hasta el lugar de los hechos una dotación de bomberos que procedieron a la extinción del incendio.