El Pozoalbense Femenino de Primera B comenzó ayer su trabajo de pretemporada con el objetivo de llegar lo más en forma posible al estreno liguero. El Eleuterio Olmo de la Ciudad Deportiva acogió la primera sesión de entrenamiento donde estuvo casi la plantilla al completo a excepción de las internacionales panameñas Karla Riley y Yomira Pinzon, que se encuentran disputando los Juegos Panamericanos con su selección, y la defensa Lola por motivo personales. Además, tampoco estuvo Saira, otro de los fichajes, y que parece que finalmente no se incorporará a la disciplina del club pozoalbense a pesar de haber firmado el contrato. 

La sesión comenzó con un primer contacto entre el cuerpo técnico y las jugadoras donde el técnico del conjunto vallesano, Manuel Fernández, dejó claros sus planteamientos y lo que quiere conseguir de su equipo. Luego llegó el turno de tomar contacto con el terreno de juego y con el balón bajo la dirección del entrenador y del preparador físico, Sebastián Sánchez

De momento, Fernández tiene a su disposición 18 futbolistas aunque su deseo es que pueda completar 22 fichas para tener un equipo más competitivo. Con todo, el técnico está «muy satisfecho» con el proyecto porque «es un equipo mucho más sólido que el año pasado, va a ser difícil poder tener una posición clara respecto a las alineaciones porque cada posición va a estar más disputada». Del mismo modo, elogió la configuración de un cuerpo técnico que «va a hacer crecer al equipo y a mí como entrenador». 

El primer partido de pretemporada llegará el sábado 3 de agosto con un triangular donde participarán el Pozoalbense junto al Santa Teresa y el Sporting Club de Portugal. Siete días más tarde, las pozoalbenses se medirá  al Córdoba en el torneo de la Peña Real Madrid. Santa Teresa y Atletico de Madrid B son los últimos rivales cerrados para el equipo vallesano.