Las celebraciones de la plantilla del Club Deportivo Pozoblanco y su afición hace una semana cuando aseguraron la tercera plaza en la clasificación han encontrado sentido en el día de hoy. El club esperaba un traspié del Ceuta en la fase de ascenso para volver a ser equipo de Tercera División cinco años después. El empate entre el conjunto ceutí y El Prat deja fuera de la lucha por el ascenso a Segunda a los primeros y, por tanto, una plaza más de ascenso a Tercera que es la que ya le pertenece al equipo vallesano. El Pozoblanco se suma de esta forma al Rota y el Antoniano. 

El Pozoblanco de Juan Carlos Quero asciende a Tercera División después de una excelente temporada en la que destaca una segunda vuelta donde el equipo ha sumado 38 de los 51 puntos posibles. Esta vez no llegó el bajón experimentado en temporadas anteriores, todo lo contrario, y todo ello bajo la dirección de un entrenador que asumía su primer reto fuera de las categorías base. Llegar y triunfar. 

Fue el 21 de mayo de 2014 cuando el equipo blanquillo disputó su último partido en la categoría a la que regresará la próxima temporada. Un empate ante el Arcos dejó al equipo adiestrado por aquel entonces por Mario Rojas en la Primera Andaluza después de diez años consecutivos en Tercera. Desde entonces, el objetivo no era otro que volver a Tercera División, año tras años, pasando mientras tanto de la Primera Andaluza a la División de Honor. 

Un lustro en el que la entidad ha cambiado de dirección también en los despachos con José Antonio Bravo diciendo adiós a la presencia y con Patricio Moreno asumiendo ese reto, primero como junta gestora y después conformando su junta directiva. Ahora el club afronta la confección de un proyecto para Tercera, pero antes toca celebrar una vuelta muy esperada.