La dirección provincial de IULV-CA Córdoba, tras conocer el acto previsto para hoy viernes en Pozoblanco, en el que el Obispo de Córdoba visitará dos centros educativos públicos de la localidad, donde se reunirá con el alumnado de los mismos exigió ayer a la Delegación de Educación de la Junta de Andalucía en Córdoba que “paralice inmediatamente dichos actos” que, además, tendrán lugar en horario lectivo.

Para Elena Cortés, parlamentaria andaluza de IULV-CA por Córdoba, es “deber de la administración autonómica defender la aconfesionalidad de la escuela pública” y “si el Obispo quiere mantener encuentros con la juventud de Pozoblanco, que lo haga fuera del horario lectivo”.

Cortés manifiesta que “no consideramos de recibo que el Obispo de Córdoba, el cual se ha destacado por su lucha en contra de la igualdad entre hombres y mujeres, o el matrimonio homosexual, entre otros, tenga que paralizar la actividad escolar de un centro educativo público, en el cual, además, sí se defiende el respeto por los derechos de las mujeres y la igualdad. No se puede poner una vela a Dios y otra al diablo”, afirma la diputada autonómica.

Por su parte, Sebastián Pérez, responsable de Organización provincial de IULV-CA Córdoba, indicó que “en estos momentos, en los que se habla del adoctrinamiento con tanta ligereza, hechos como estos constatan que algunos sectores de los poderes fácticos de nuestro Estado han utilizado, y continúan haciéndolo, la educación pública para sus propios intereses”.

La respuesta de la Junta

Por su parte, la delegación de Educación de la Junta en Córdoba aclaró en el día de ayer que la visita del obispo de Córdoba, Demetrio Fernández, a dos centros educativos públicos de Pozoblanco «se realizará dentro de las actividades concertadas y aprobadas por el consejo escolar de los colegios». Del mismo modo se indicó que la visita del obispo, no solo se ha aprobado por los consejos escolares de los respectivos centros educativos, sino que, además, «se llevará a cabo durante la clase de Religión, sin interrumpir el normal desarrollo del resto de actividades académicas de los centros, y solo asistirán los alumnos de Religión Católica».