El 23 de abril se conmemora el Día Internacional del Libro, una fecha para reivindicar la importancia de la literatura. Los libros son un vehículo imprescindible de aprendizaje, de crecimiento personal e intelectual, una forma de vivir historias contadas por otras. Para celebrar el Día del Libro hemos decidido hacer una lista de recomendaciones, no la hacemos nosotros, sino que nos llegan de la mano de personas que han querido colaborar en este artículo que nace con un único objetivo, dejar claro lo emocionante que es leer.
La periodista y escritora Pilar Cámara nos recomienda «Circus Girl», de Maite Dono y lo hace de esta forma: «Me empeño en decir que hay libros que son mujeres por culpa, entre otros, de ‘Circus Girl, de Maite Dono, un poemario al que regreso una y otra vez. Lo recomiendo por el placer que, a veces, provoca la incomodidad: los versos de Maite pueden ser un cataclismo. Y porque aquí queda claro que el punk no es un género exclusivamente musical«.
Miguel Ángel Torrico, profesor en el IES Antonio María Calero, se decanta por Trilogía de Nueva York: formada por Ciudad de cristal, Fantasmas y La habitación cerrada. ¿Por qué? Aquí sus razones: «Son novelas policíacas al estilo peculiar de Paul Auster. Una forma de escribir en la que se tiene muy en cuenta el papel del creador. Desde ese punto de vista recuerda al Cervantes de El Quijote. La protagonista de estos relatos policíacos es la ciudad de Nueva York y unos personajes un tanto peculiares«.
«Palabra sobre palabra», «la poesía casi completa de Ángel González, es uno de los libros que más han influido en mi formación como lector y en mi concepción de la poesía. Recoge todos los poemarios publicados por el maestro ovetense hasta 2001. Casi dos décadas y media después de descubrirlo, y diecinueve años después de conocerlo en persona, su lectura sigue siendo recurrente e inédita. Lo que más he atrae de él es la perfecta combinación entre intimismo y compromiso social y el empleo de un lenguaje en apariencia sencillo y transparente, cercano a la coloquialidad, en el que se destila el enigma de lo cotidiano.
El paso del tiempo, el amor y la solidaridad y fraternidad con el otro son los ejes sobre los que articula una poética que, mimando el componente formal, incide en la dimensión ética del poema, concebido como un ejercicio de resistencia y de dignidad«, así nos lo cuenta el escritor Francisco Onieva.
Rodeada de libros al forma parte del grupo humano que conforma la Biblioteca de Pozoblanco, Angélica Cabello opta por «Vestidas para un baile en la nieve», de Monika Zgustova. Nos lo explica así: «Me encantó. Basada en hechos reales, aparte de ser un relato conmovedor y de superación de unas mujeres en campos de trabajo, el libro es un ejemplo más de las capacidades que el ser humano tiene para salir hacia adelante cuando queda expuesto a situaciones límites. Maravilloso cómo la cultura y la literatura son elementos imprescindibles para sobrevivir. Lo recomiendo«. Y nosotros lo apuntamos.
Pedro García, director del centro salesiano «San José» recomienda uno de los fenómenos literarios más recientes, «Patria», de Fernando Aramburu. “Un capítulo más y apago la luz”… Fernando Aramburu consiguió que me repitiese esta frase una noche detrás de otra. ¿Se puede decir algo más hermoso de un libro? “Patria” es un libro sencillo de leer, aunque complejo en su confección (¡hay que ser bueno para hacer esto!) F. Aramburu convierte al lector en un “ser empático” (“multiempático”… Si esta palabreja existe), haciendo que se meta en los zapatos de personajes distintos, contrarios, opuestos.
Sus páginas nos hablan de ETA en el mundo real, de unos hechos que conviene no olvidar para entender la historia reciente de España y de los españoles. Y esto (opinión personal) cada vez se hace más necesario en nuestros jóvenes (conocer, entender, reflexionar), que poco adelantamos construyendo el futuro sobre el vacío: somos andando, lo que fuimos es parte de lo que somos, somos lo que soñamos que vamos a ser (también lo que nos dejen)».
«Recomiendo leer «Hija de Sexto Mario. El hombre más rico de las Hispanias», de María Antonia Rodríguez. Es una novela que entrelaza los datos históricos y ficticios para narrar una historia de amor llena de luchas, intrigas y bajas pasiones. Un historia de grandes personajes que nos van mostrando cómo la codicia, el lujo y la traición corrompían la sociedad romana. Desde el primer momento te atrapa, y si te gusta la novela histórica no te defrauda en absoluto. No tiene nada que enviar de otras novelas más «vendidas o famosas«. Esta es la recomendación que nos llega por parte de Isabel Fernández, de la librería 17pueblos.es.
Novela, poesía y también cómic porque el periodista Juanlu Dorado se centra en este género en el Día Internacional del Libro. «Mi recomendación es «Batman, El Regreso del Caballero Oscuro», de Frank Miller. Lo recomiendo porque para mí, como lector de cómics, supuso una bofetada de realismo hace muchos años y me enganchó a un persona épico, oscuro y único como Batman. No es lo habitual recomendar cómics en el Día del Libro, pero es una manera fantástica de disfrutar de la lectura y, con El Regreso del Caballero Oscuro, estamos ante uno de los mejores de la historia y, sin duda alguna, aquel que revolucionó para siempre la forma de contar las aventuras de héroes, superhéroes y antihéroes».
Técnico de Cultura del Ayuntamiento de Dos Torres, Miguel Coleto se suma a esta iniciativa con «Esperando al Rey», de José María Pérez «Peridis». «Se trata de una novela histórica relativamente reciente, de 2014, en la que el autor nos traslada al Medievo para narrar una trama fascinante de conspiraciones e intrigas palaciegas entre reyes y nobles, sin perder de vista la descriptiva fotografía que el escritor hace del paisanaje de aquella época: artesanos, campesinos, comerciantes,… En definitiva, se trata de la historia de nuestros antepasados, de quienes vivieron hace 800 años, de quienes construyeron y dieron vida a los monumentos y a las tierras y paisajes que hoy conocemos.
La novela se ambienta en pleno siglo XII, en la infancia y minoría de edad del Rey Alfonso VIII (1155-1214), con unos personajes muy bien definidos y desarrollados, con sus grandezas y miserias. Como hecho significativo, decir que los personajes femeninos toman protagonismo sobre los hombres, de hecho es Teresa Fernández de Traba, hija del Conde de Traba y Señor de Trastámara, la verdadera protagonista de la novela, una auténtica reina de Castilla en la sombra.
En resumen, una obra perfectamente ensamblada en estructura y desarrollo, con unos personajes bien perfilados y una gran profusión de detalles y pormenores de aquellos tiempos, propia de un buen arquitecto y dibujante como lo es su autor. Por último, destacar que Peridis obtuvo con este libro el Premio de Novela Histórica Alfonso X el Sabio 2014«.
El jueves presenta «Cine francés para nostálgicos», pero antes Serafín Pedraza nos deja su recomendación. «El Conde Montecristo» de Alejandro Dumas fue la primera novela que verdaderamente me fascinó en mi primera juventud. Una historia repleta de personajes, de situaciones imprevisibles, de misterio. Una época lejana en un país que ya había cambiado mucho. Un relato sobre la voluntad firme de salir adelante frente a la codicia, la envidia, o la maldad de unos cuantos. Una auténtica historia de superación, sustentada por personajes ricos en matices. Recorrido asombroso por todas las posibilidades de la condición humana, desde las facetas más luminosas a las más negras. La arquitectura de esta novela es un compendio de sabiduría y talento, creando un puzle que ha hecho de ella un auténtico clásico de la literatura. Y por encima de todo una historia de venganza, seguramente una de las mas cautivadoras jamás escritas, que no cae en la tentación de un final feliz. Más bien una terminación agridulce – como la vida misma -, que cierra el relato de un hombre que podría haber sido feliz, pero tuvo que vivir otra existencia muy distinta a la que él esperaba.
Fueron noches y días de lectura, sin descanso, empujado por el viento de una historia que no deja un momento de respiro, ni tiempos muertos. Uno de esos libros en los cuales el lector entra como si fuera un personaje más, y vive intensamente una aventura que no se esfuma con el punto final».
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