La Fundación PRODE ha ampliado sus líneas de negocio con la apertura de la estación de servicio Prodenergy en Pozoblanco y que generará, por el momento, cinco puestos de trabajo para personas con discapacidad. El presidente de la Fundación, Blas García, expresó durante la inauguración que “con esta nueva línea de negocio de Fundación PRODE serán, inicialmente, cinco personas con diferentes tipos de discapacidad las que tendrán la oportunidad de entrar en el mercado laboral y así disponer de las ventajas que tiene encontrar un trabajo de cara a su desarrollo personal”. La inversión realizada ha rozado los 500.000 euros. 

García habló de «transparencia y honestidad» y quiso lanzar un mensaje claro, «Prode va a estar donde haya un puesto de trabajo» de ahí que desde la Fundación se abogue por la diversificación y sus líneas de negocio impliquen varios sectores como la hostelería, la energía o los servicios. «Es nuestra razón de ser, la generación de empleo y la creación de riqueza», expuso. No eludió tampoco el presidente de Prode las dudas que han surgido en torno a la apertura de esta gasolinera por su ubicación. 

A este respecto, Blas García indicó que «Prode es muy exigente porque no puede permitir que el nombre de la discapacidad quede manchado y nuestra máxima garantía es la ley». García detalló que antes de la apertura de este negocio se procedió a pedir un informe urbanístico, así como los relacionados con la seguridad o medio ambiente. «No queríamos dudas al respecto, estamos amparados por la ley y cuando uno va por derecho puede hacer lo que quiera, esa es nuestra garantía», sentenció. 

Por su parte, el director general de la entidad, Jesús García, indicó que “la única inclusión real es la que se consigue gracias a un trabajo que te permita disponer de recursos económicos para ser feliz. El motivo de que abramos esta gasolinera es para que el mayor número posible de personas con discapacidad sean felices y vivan su propia vida, ganando un salario que lo permita”.

“La tasa de empleo de las personas con discapacidad es casi 3 veces menor que la tasa de empleo de las personas sin discapacidad. Es decir, solo una de cada cuatro personas con discapacidad tiene empleo. Estos datos son devastadores, y Fundación PRODE asume el reto de luchar contra esta situación injusta”, expresó Jesús García.