La alegría y la emoción convivieron ayer durante la cabalgata de María Auxiliadora, que cumpliendo con su cita de cada año llenó las calles de Pozoblanco del color que dieron los disfraces de pequeños y mayores. Emocionante fue el homenaje que el colegio salesiano quiso realizar al que fuera uno de sus profesores, Rafael Blanco, fallecido recientemente y cuya fotografía encabezó la cabalgata y su recuerdo estuvo presente para muchas de las personas que integraron la comitiva.

Fueron muchos los niños y mayores que este año se sumaron a una Cabalgata que es una de las citas imprescindibles de la localidad y que año tras año consigue que la ciudadanía se involucre. Los disfraces, para todos los gustos. Payasos, indias, princesas y príncipes, héroes de cómic, cavernícolas, botes de cola coa, toreros y un largo etcétera que sirvió para dar color y originalidad a un desfile que salió desde el Colegio Salesiano y que recorrió las principales calles del municipio.

Para hoy queda la procesión donde María Auxiliadora saldrá a las calles de Pozoblanco junto a Don Bosco y los niños y niñas que este año han recibido la primera comunión. La procesión saldrá a las 19:00 horas, adelantando su horario habitual, y seguirá el siguiente itinerario: Plaza Padres Salesianos, San Juan Bosco, San Antonio, San Rafael, Demetrio Bautista, Mayor, Real, Andrés Peralbo y Plaza Padres Salesianos.