El Ayuntamiento de Pozoblanco ya tiene presupuesto para el ejercicio 2026 tras su aprobación por pleno, aunque ahora resta su publicación y exposición pública para su aprobación definitiva. Unas cuentas que alcanzan los 17,9 millones de euros y que vuelven a presentarse sin abogar por el consenso entre todas las fuerzas políticas representadas en el Consistorio. Fruto de ello, el salón de plenos presentó una imagen poco habitual porque llegaron a faltar hasta seis concejales, aunque una hora después del comienzo del mismo se sumaron los ediles de Izquierda Unida. Cuestiones personales y laborales fueron las razones de las ausencias en un pleno que se convocó de manera oficial horas antes de su celebración, aunque extra oficialmente fue el día 24 cuando se dio a conocer la intención del equipo de gobierno de elevar las cuentas a pleno. En ese margen de tiempo, ninguna reunión previa para intentar llegar a acuerdos más allá de la comisión previa exigida por normativa algo que la oposición volvió a reprochar al equipo de gobierno. 

Dejando a un lado las formas, el fondo del presupuesto, como ya avanzó este periódico, se eleva a los 17,9 millones de euros, un 5,4 por ciento más con respecto al presupuesto de 2025 sustentado en la Participación en los Ingresos del Estado. Las inversiones también crecen aunque la partida no llega al millón de euros -882.396,11 euros- y no aparecen partidas para inversiones definidas de entidad. Una partida genérica para mejora de infraestructuras viarias es la más alta ya que está dotada con 364.000 euros, seguida de una de algo más de 164.000 euros para actuaciones de mejora en infraestructuras viarias y de 116.396,11 euros para la nave del recinto de concursos del Club Hípico. De las inversiones esperadas y prometidas, polígono, residencia y mercado, únicamente parecen 98.000 euros para un proyecto de mercado que todavía queda por definir después de años de titubeos, dudas y reformulaciones. 

El encargado de defender las cuentas fue el alcalde, Santiago Cabello, que intercaló algunas de las propuestas con un balance de gestión que invitaba a pensar que se estaba en un pleno precisamente de eso, de balance. El primer edil destacó las obras dentro del ciclo integral del agua, la remodelación de calles, el apoyo al sector del comercio, a los empresarios y a las familias con las ayudas que se repetirán a lo largo de 2026, así como a los jóvenes con el Plan Alquila o a las diferentes asociaciones que perciben subvenciones municipales. Luego, el portavoz del PP, Miguel Ruiz, ratificó el apoyo a las cuentas dejando claro que no son un documento cerrado y que podrán variarse en función de las necesidades. Es decir, adelantó las modificaciones de crédito que viene realizando el equipo de gobierno año tras año para ajustar un presupuesto que olvida lo gastado realmente durante el ejercicio anterior por lo que obliga a esa ampliación de crédito. 

No convencieron los parabienes vistos por el equipo de gobierno a la oposición que rechazó tanto las formas de llevar los presupuestos a pleno como el fondo de los números. Más allá de criticar el presupuesto, la oposición dejó algunas cuestiones para la reflexión y por ahí empezó el concejal Gerardo Arévalo, que invitó a pensar «por qué cambian personas claves para la confección de este presupuesto y del funcionamiento del Ayuntamiento como son los interventores y los secretarios». Arévalo aseguró que el presupuesto es un ejercicio de «demagogia» que busca «el electoralismo continuo» y se olvida de cuestiones básicas como medidas contra la despoblación o la industrialización.

No fue mucho más positivo el portavoz del PSOE, Rafael Villarreal, que lamentó que «un pueblo como Pozoblanco, con un presupuesto de casi 18 millones de euros, dedique apenas 800.000 euros a inversiones» y ninguna de ellas venga a cambiar el rumbo de la localidad. Además, indicó que su grupo había realizado aportaciones que no habían sido tenidas en cuenta y que pasaban por aumentar la partida de inversiones, elaborar un Plan Urbanístico del Centro de la localidad, ampliar la partida de juventud, una dotación específica para la residencia de mayores o un refuerzo del área de desarrollo económico y empleo. 

Por último, el portavoz de IU, Emmanuel Vioque, que tuvo un único turno de palabra al sumarse tarde pero dentro del primer turno, también puso el foco en las formas indicando que «usted tiene el poder y no nos queda otra que soportarle, pero en la Mancomunidad le han echado». Esa fue la última parte de una intervención donde el portavoz de la formación de izquierdas criticó duramente el presupuesto y expuso, de igual modo, algunas de las propuestas realizadas por su formación. Ideas que pasan por un plan plurianual de inversiones para plasmar las tres inversiones antes mencionadas: polígono, mercado y residencia, inversiones que se completarían con aportaciones de otras administraciones. IU también pidió el compromiso de licitación y redacción del proyecto de la residencia.