Ante el avance de la lengua azul en las últimas semanas, Asaja Córdoba ha vuelto a exigir, como ya lo hizo a finales de julio, un plan de choque y ayudas para los ganaderos afectados por la enfermedad, especialmente los de ovino y caprino.  La organización agraria denuncia que, mientras los ganaderos ven cómo sus explotaciones están sufriendo enormes pérdidas económicas, los máximos responsables del Ministerio de Agricultura y de la Consejería de Agricultura de la Junta de Andalucía «se encuentran de vacaciones sin aportar ninguna solución urgente a este gravísimo problema», considerando esta situación muy injusta para todos los afectados. 

Desde Asaja, se reitera nuevamente que la lengua azul es una enfermedad que no afecta a las personas, pero que tiene graves repercusiones para los animales, por muerte, debilidad extrema, falta de producción láctea y que provoca numerosos abortos, lo que tiene dramáticas consecuencias económicas para los ganaderos. 

Para Asaja, el hecho de que las confirmaciones de explotaciones positivas a lengua azul en diversas zonas sean la mayoría con el serotipo 8, salvo algunas del serotipo 3 al no estar vacunadas en estos casos, pone de manifiesto la eficacia de las vacunas en campaña realizada por la Consejería de Agricultura de la Junta de Andalucía de la vacunación frente al serotipo 3 realizada a finales del pasado año, ya que el resto de explotaciones vacunadas no han mostrado infección por dicho serotipo. 

«Por ello, se hace necesario y urgente activar un plan de choque para que se vacune toda la cabaña ganadera en el momento sanitario oportuno frente a los cuatro serotipos circulantes (1, 3, 4 y 8), así como aplicar medidas de desinsectación para controlar al vector transmisor del virus. Y dentro de este plan de choque, debe replantearse que la vacunación pase de nuevo a ser obligatoria en toda España. También, la Junta de Andalucía debe facilitar las vacunas de forma gratuita a todos los ganaderos, como lo hace la Junta de Extremadura», aseguran desde Asaja. Además, se añade que «este plan de choque es fundamental para facilitar los movimientos comerciales a nivel nacional e internacional y es especialmente relevante su aplicación en el ganado ovino, caprino y vacuno lechero, dado el impacto directo que está teniendo la enfermedad en la producción láctea». 

Además, Asaja considera que es necesario una profunda reflexión sobre la gestión de la sanidad animal en Andalucía y España, pues los hechos están demostrando que «después de muchos años de planes de erradicación de enfermedades, los resultados no son los que deberían obtenerse, no sólo con la lengua azul si no con otras enfermedades como la tuberculosis». 

Por otro lado, Asaja solicita, tanto al Ministerio de Agricultura como a la Junta de Andalucía, responsables últimos de la gestión de la sanidad animal, que habiliten de forma urgente y coordinada un plan de ayudas para todos los ganaderos afectados sin excepción, que les compense las enormes pérdidas que están teniendo por el desarrollo de esta enfermedad.