A dos puntos de la salvación se encuentra un Club Deportivo Pozoblanco que buscará mañana domingo (12:30 horas) volver a sumar tres puntos que necesita para no perder el ritmo y no dejar escapar a sus rivales más directos. Intentará el equipo de Mario Rojas vencer lejos de su feudo ante un equipo que le trae buenos recuerdos, el Mairena, el primer rival ante el que los pozoalbenses sumaron los tres puntos en la presente temporada. Por aquel entonces, y tras acumular siete derrotas consecutivas, los blanquillos vencieron 2-1 al cuadro sevillano.

Para conseguir su objetivo, el Pozoblanco tendrá que cambiar la actitud que se le vio al equipo en su último enfrentamiento liguero y de ello es consciente su entrenador. «Tengo claro que no podemos salir tan agarrotados, el equipo salió ante el Sevilla C con mucha presión y eso no es bueno», indicó un Rojas que buscará que los suyos recuperen la actitud de los últimos partidos, a excepción del mencionado, y «presionemos arriba y salir, como siempre, a por todas».

No lo tendrá nada fácil el cuadro blanquillo porque delante tendrá a un Mairena que sigue luchando por meterse en el grupo de los de arriba y cualquier tropiezo puede acabar con esa lucha. El técnico del Pozoblanco volverá a tener a casi todos sus hombres a disposición, a excepción de los jugadores con lesiones importantes como Molero o Silva, aunque atisba un cambio en el lateral izquierdo donde descansará Ángel por una sobrecarga muscular. Su lugar será ocupado por Vega, que reconoce que se siente «cómodo» en esta posición.

Como siempre, el resto de dudas para Rojas llegarán con la posición que ocupen hombres como Fran o Charaf, ya que no tiene muy claro «si partir de una defensa muy fuerte o reforzar la línea del medio campo». Así las cosas, el equipo hará todo lo posible para conseguir su primera victoria fuera de casa y reducir el déficit de puntos que arrastra en este sentido. La tarea no es fácil y los jugadores son conscientes de ello, aunque también confían en su trabajo.