El Autocares Vilaplana Fútbol Sala Pozoblanco aprovechó la ausencia de jornada durante el puente de diciembre para ponerse al día en cuanto a sus partidos aplazados jugando el pasado sábado ante el Écija. Un choque correspondiente a la primera jornada de la competición que quedó aplazado por la situación que vivía la ciudad sevillana por el Covid-19. Finalmente, el equipo de Thiago Marques no pudo ganar por lo que cerró la primera vuelta con un bagaje de seis derrotas y una única victoria. 

De nuevo le tocó al conjunto pozoalbense apelar a una remontada y trabajar con el desgaste que supone ir por detrás en el marcador. Y es que ya en el minuto 4 Adrián Villarín vio puerta e hizo un 0-1 que el conjunto visitante amplió pasados los diez minutos de juego con Javier Gallego estableciendo el 0-2. Con todo, antes de que ambos equipos se fueran al descanso el cuadro pozoalbense recortó distancias con el 1-2 rubricado por Crespo. 

Tras las alternativas que hubo en el inicio de la segunda parte, Diego Gallero se erigió como líder de los de Thiago Marques haciendo dos goles de manera consecutiva que pusieron por delante a los locales. Le duró muy poca esa alegría al cuadro pozoalbense ya que los dos goles de Gallego fueron respondidos por Adrián Villarín. 

Así, el 3-2 que reflejó el marcador en el minuto 34 se convirtió en un 3-3 un minuto después y cuando ya se firmaba el empate de nuevo el jugador del Écija golpeó para que los tres puntos fueran al casillero del conjunto sevillano. El próximo encuentro liguero volverá a enfrentar a los dos equipos, aunque esta vez el Autocares Vilaplana ejercerá de visitante.