El consejero de la Presidencia, Administración Pública e Interior y portavoz del Gobierno andaluz, Elías Bendodo, comentó ayer lunes que «no descartaría» que la vuelta a las aulas a partir del próximo curso escolar 2020-2021, en septiembre, pueda producirse en Andalucía «con absoluta normalidad» si no hay «rebrotes» en la evolución de la pandemia del coronavirus en estas próximas semanas en la comunidad autónoma.

Así lo trasladó el consejero portavoz en una entrevista en Canal Sur Radio, recogida por Europa Press, en la que, acerca de la vuelta a las aulas a partir del próximo curso escolar, quiso dejar claro que «se va a pactar con la comunidad educativa», de forma que no se hará «a espaldas de los andaluces».

No obstante, también indicó que no debe haber «17 maneras distintas» de vuelta a las aulas el próximo curso en España, en función de lo que decida cada comunidad autónoma, por lo que espera que el Gobierno central, dentro del decreto para regular normas de cara a la ‘nueva normalidad’ que tiene previsto aprobar hoy martes en Consejo de Ministros, marque «unas directrices básicas» para el regreso de los escolares a clase.

«Si no lo hace, Andalucía está preparada», matizó Bendodo, quien insistió en que «la vuelta a las aulas presencial se producirá en septiembre y de forma acordada con la comunidad educativa», aunque «el Gobierno de España todavía tiene que emanar una norma» y, «a partir de ahí, las comunidades autónomas desarrollaremos».

En todo caso, apuntó que «si la incidencia del virus sigue al ritmo que va, que prácticamente va desapareciendo poco a poco» en Andalucía, «no descartaría una vuelta a las aulas con absoluta normalidad», siempre y cuando «no haya rebrotes» de la pandemia, según insistió

En ese sentido, Bendodo incidió en que Andalucía entra ahora «en un punto de inflexión» en la evolución de la pandemia, con su pase a la Fase 3 del plan de transición hacia la ‘nueva normalidad’ y con la autorización de la movilidad entre sus ocho provincias coincidiendo con esa fecha.

Se trata, según advirtió, de «una prueba de fuego», porque la movilidad entre provincias que la Junta de Andalucía ha autorizado desde este lunes «puede suponer que haya rebrotes que complicarían la vuelta a las aulas».

También agregó que, aunque la previsión es que el regreso a las aulas se desarrolle de forma presencial desde septiembre, la pandemia ha puesto en evidencia que determinadas fórmulas, como el teletrabajo o a las clases telemáticas, se pueden «implantar a medio y largo plazo», para lo que, no obstante, habría que «dotar a la educación pública del material necesario para que todos los alumnos» tengan a su alcance las nuevas tecnologías requeridas para ello, según añadió.