El consejero de Educación y Deporte, Javier Imbroda, presentó el plan de acción de la Junta para el curso 2020-2021 con vistas a la incorporación a las aulas en septiembre, aprobado este martes por el Consejo de Gobierno, y que, entre otras medidas, contempla la contratación de 6.000 profesores más, así como la creación de perímetros de seguridad en los accesos a los centros para evitar aglomeraciones y, por tanto, posibles contagios por coronavirus. En cuanto a la ratio de alumnos por clase se mantienen exactamente igual y la recomendación de no superar los 20 alumnos por clase dependerá de los centros y sus posibilidades. 

Imbroda garantizó que la vuelta a las aulas en Andalucía será de «presencialidad segura» con un plan que, dotado con 600 millones, se ajusta a un decálogo de medidas sanitarias dictadas por la Consejería de Salud y que pilota sobre siete ejes basados en la digitalización de los centros, el refuerzo curricular y del personal o la formación del profesorado.

Respecto a las condiciones de incorporación del alumnado, docentes y personal de administración a los centros educativos, la Consejería atenderá a lo establecido por las autoridades sanitarias. En este sentido, elaborará unas instrucciones para la vuelta presencial a partir del documento de medidas higiénico-sanitarias elaboradas en coordinación con la Consejería de Salud y Familias, a las que podrá hacer aportaciones la comunidad educativa y que se revisará cada dos semanas.

Estas instrucciones adaptarán al ámbito educativo medidas de higiene preventiva general (lavado de manos y uso de soluciones hidroalcohólicas); uso de mascarillas y mantenimiento de la distancia social de 1,5 metros; de limitación de contactos que, en determinados contextos, permitan prescindir del uso de mascarilla; ventilación periódica de los espacios y limpieza; desinfección diaria de los centros, así como se establecerá un protocolo de acceso y salida de los centros y se creará un perímetro de seguridad para evitar aglomeraciones, para lo que solicita la Junta la intervención de los ayuntamientos.

Del mismo modo y según lo anunciado, la Junta reforzará las plantillas de los centros andaluces con 6.000 docentes más, y también la dotación de recursos tecnológicos con 150.000 dispositivos para paliar los efectos del Covid-19 en el sistema educativo andaluz y establecer las bases de un nuevo modelo. En concreto, la Consejería dotará a los colegios e institutos de recursos humanos suficientes para paliar los efectos que se hayan podido producir en los procesos de enseñanza-aprendizaje durante la suspensión de la actividad lectiva presencial en el curso 2019/20. En concreto, además del incremento neto de 450 docentes en el sistema público, el plan permitirá incorporar con carácter extraordinario a esos casi 6.000 maestros y profesores tanto para llevar a cabo las medidas de desdoble y garantizar la atención educativa al alumnado como para asegurar el cumplimiento de las recomendaciones sanitarias. Este refuerzo extraordinario de las plantillas docentes se destinará fundamentalmente a los centros que tengan un mayor número de estudiantes por aula para facilitar los desdobles y reducir, por tanto, los alumnos en las clases.

Imbroda también ha explicado que cada centro educativo contará con un equipo Covid, que elaborará el plan de actuación específico de su centro; y una persona de enlace del centro de salud de referencia que se incorporará al equipo Covid de cada colegio e instituto.

Crítica de los sindicatos

Para CCOO las medidas no responden a la necesidades actuales y el secretario General de la Federación de Enseñanza del sindicato, Diego Molina, ha indicado que “las medidas planteadas no son sólo irresponsables, sino que además se hacen públicas sin ninguna transparencia y sin consenso con la comunidad educativa ni con las organizaciones sindicales, que hemos sido convocadas a una reunión el próximo jueves, reunión a la que valoramos si asistir ante esta actuación y la falta del más mínimo acuerdo”.

La Consejería, entre sus medidas, plantea un reforzamiento de plantilla nimio, que en el número global actual de profesorado en Andalucía, según CCOO, supone sólo un incremento del 4 por ciento , cuando la necesidad de profesorado para prevenir la propagación de este virus debe superar el 30 por ciento, una inversión que aún con esta cifra seguiría siendo inferior a los recortes padecidos en la educación andaluza en los últimos años.

En este sentido, Molina denuncia que “lo anunciado adolece de medidas que sean realmente preventivas frente a un virus que sigue entre nosotros, no siendo posible reiniciar la actividad docente como si estuviéramos en la más absoluta normalidad”. Además, CCOO critica las medidas planteadas por el Gobierno de la Junta de Andalucía porque «ponen en peligro a la ciudadanía en su conjunto, ya que la institución escolar se vertebra en toda la sociedad y un rebrote en un aula tendría una repercusión en un amplio número de personas. Por ello, es imprescindible reducir la ratio, una cuestión que no contemplada la Consejería de Educación, sino que más bien actúa de modo contrario al suprimir aulas con solicitudes o incluso centros completos».