El número de fallecidos en la residencia de mayores Ntra. Sra. de Gracia de Alcantarilla ha aumentado en las últimas horas con el fallecimiento de otro residente, según ha comunicado la Fundación Prode, que gestiona este centro. En ese mismo comunicado, la Fundación indica que la situación actual, además de los cuatro residentes positivos fallecidos que presentaban patologías previas de gravedad, es de 23 residentes positivos, de los que 20 son asintomáticos permaneciendo en aislamiento conforme a los procedimientos marcados por la Autoridad Sanitaria Competente y con tratamiento antibiótico; y 4 profesionales positivos, tres auxiliares de enfermería y la directora, que se encuentran en aislamiento domiciliario. 

La Fundación ha explicado que «el pasado 26 de marzo, tras el ingreso en el Hospital Valle de Los Pedroches, de una residente, por presentar agravamiento de sus patologías previas, nos llegó, por parte de personal competente del Área Sanitaria Norte, la comunicación de que la prueba de Coronavirus realizada a nuestra residente tenía resultado positivo. Desde que la Dirección del Centro tuvo conocimiento de este primer caso, lo puso en conocimiento de la dirección de la Fundación así como del Comité de Prevención y Seguimiento de la organización, quien activó de manera inmediata, en coordinación con el Equipo de Apoyo Sanitario a Residencias de la zona, todos los procedimientos establecidos para el tratamiento de casos positivos en Residencias de Mayores: aislamiento por contacto de todos los residentes que habían tenido relación en espacios comunes con la persona positiva, división del Centro en 4 sectores, según marca la Orden 265, de 19 de marzo. Así mismo, se comunicó detallada e individualmente la situación a todos los familiares». 

A partir de ahí, se realizaron las pruebas a todo el personal de atención directa de la residencia -auxiliares de enfermería, enfermera y fisioterapeuta-, y a la residente compañera de habitación de la primera afectada, saliendo positivos tres de los auxiliares y la usuaria. En esta fecha, la Consejería de Salud, dotó a la residencia de un médico de familia y de un enfermero del Centro de Salud de Belalcázar, que comenzaron a visitar diariamente la residencia, estudiando in situ el estado de cada uno de los residentes.

A continuación, en dos tandas más, entre los días 31 de marzo y 3 de abril, se les practicó la prueba al resto de trabajadores y de usuarios, de las que resultaron positivos 1 trabajador (dirección de la Residencia) y 26 usuarios más. Ese mismo día, Fundación PRODE procedió a la selección y posterior incorporación de 6 auxiliares de enfermería, y se solicitó a la Autoridad Sanitaria competente refuerzo de personal sanitario.

«Desde Fundación PRODE se está trabajando con absoluto compromiso, transparencia, profesionalidad y máximo rigor en la protección de la salud de todos sus usuarios, residentes y profesionales, así como de las familias, clientes, proveedores y el resto de grupos de interés de la organización. Con este firme objetivo se constituyó el Comité de Prevención y Seguimiento (CPS) del COVID-19, el día 10 de marzo. Este Comité se ha encargado desde el primer momento de controlar y hacer el seguimiento de todas las medidas planificadas en Fundación PRODE para prevenir el contagio y para actuar de manera inmediata y con máximo rigor en caso de que llegara a producirse. A tal efecto, los responsables y profesionales de Fundación PRODE están siguiendo todas las indicaciones de las autoridades sanitarias y los gobiernos nacional y autonómico, estando en contacto permanente con ellos así como con todos los gobiernos locales, sin excepción, a los que se les ha dado información permanente y detallada de la situación ocasionada por el coronavirus en cada servicio de la organización en sus respectivos municipios», apunta el comunicado. 

Se prevé que durante la próxima semana, se les puedan repetir las pruebas a los residentes asintomáticos, a fin de sacar de la zona de aislamiento a todos aquellos que vayan superando el virus y el resultado sea negativo. Por último, se puntualiza que la plantilla de la residencia y la organización en su conjunto están afrontando con gran entereza tan difícil situación, poniendo su profesionalidad y sus valores humanos al servicio de la salud de nuestras personas mayores.