Lleva dos décadas dedicado al fútbol formativo, un trabajo que le permitió el pasado mes de septiembre ser nombrado seleccionador cordobés en categoría alevín. Daniel Cabrera, el director deportivo de la Escuela de Fútbol Base de Pozoblanco, da el salto y ahora suma a sus cargos el que le vincula con la Federación Cordobesa de Fútbol. Cabrera, además, se convierte en el primer entrenador de la comarca de Los Pedroches que se pone al frente de una selección provincial y lo hace con «la ilusión y la responsabilidad» que conlleva el cargo. El pasado martes ejerció como seleccionador en su Pozoblanco natal en la jornada de entrenamiento que desarrolló el combinado alevín en el Municipal pozoalbense y que finalizó con un partido frente al equipo Infantil B del Pozoblanco. A su lado, como segundo entrenador, cuenta con el también pozoalbense Pedro Jesús Arévalo. 

«Es una oportunidad bonita, un reto diferente», explicó Cabrera en declaraciones a Canal 54 avanzando que en el momento en el que se le planteó la decisión de la Federación se comprometió porque «era evidente que me gustaba la propuesta». Su trabajo pasa por formar el equipo más competitivo posible para afrontar el Campeonato de Andalucía de selecciones provinciales que arrancará el próximo 17 de marzo en Almuñécar. Para ello, se han diseñado ocho sesiones de entrenamientos llegando a Pozoblanco «porque es uno de los pocos lugares donde se puede entrenar en césped natural y el campeonato se disputará en esta superficie». 

Narra Daniel Cabrera que elegir a los jugadores que vistan la elástica cordobesa no es nada fácil por el nivel y porque son doce futbolistas, diez jugadores de campo y dos porteros, entre un amplio abanico de opciones. Para ello, el seleccionar sigue el trabajo y «no dudo en desplazarme a ningún pueblo para ver a un jugador porque entiendo que el ir con la selección cordobesa es un apoyo al trabajo que vienen realizando en sus clubes». En la preselección, Cabrera consiguió que 20 clubes de la provincia se vieran representados realizando algo que siempre ha reivindicado como entrenador, que «se mire a los pueblos, no solo a la capital». 

No obstante, con la Primera Andaluza Alevín en marcha y los equipos de la capital inmersos en la misma es inevitable mirar a sus plantillas porque el nivel competitivo es otro. «Podemos llevar a cuatro jugadores máximo de un club, hay alguna duda, pero lo tenemos claro», indica. Habla en plural porque a su lado tiene a Pedro Jesús Arévalo, su segundo entrenador en esta aventura, alguien que «es mi mano derecha aquí en Pozoblanco, es una persona que me aporta mucho, con el que me compenetro muy bien porque pensamos diferentes, pero somos compatibles. Es importante rodearte de gente que te ayude».