Centenares de personas disfrutaron de una nueva edición del Día del Dulce conventual en el Monasterio de Santa Clara de Belalcázar. Las hermanas clarisas abrieron las puertas del convento para ofrecer su impresionante historia y patrimonio a cuantos quisieron acercarse ante una de las riquezas patrimoniales de la comarca de Los Pedroches. Desayuno, visitas guiadas, una mirada muy especial a la comarca y un concierto de villancicos fueron las propuestas para un Día del Dulce que llevó a muchos ciudadanos hasta Belalcázar en la jornada dominical del puente de la Constitución. 

A pesar del intenso frío que marcó la jornada, el Convento de Santa Clara empezó a recibir a los primeros visitantes desde primera hora de la mañana para disfrutar del desayuno conventual, primera parada obligatoria para probar algunas de las delicias que salen de las cocinas del Convento, dulces que sustentan la actividad económica de las hermanas clarisas y que se han convertido en el mejor reclamo para conocer este rincón de Belalcázar. Considerado como el segundo edificio religioso más importante de la provincia, después de la Mezquita de Córdoba, lo cierto es que el Convento de Belalcázar necesita pocas excusas para conocerlo. 

No obstante, esta jornada se ha convertido ya en un día ideal para acercarse a su historia a través de las visitas guiadas que permiten conocer algunos de los 7.000 metros edificados en un espacio que alcanza los 25.000 metros. La capilla, el panteón -sin restaurar pero abierto al público desde el verano-, la enfermería, el claustro o el coro son algunos de los espacios que se van conociendo, así como una historia ligada íntimamente a la de Elvira de Zúñiga. Una historia que versa sobre el Condado de Belalcázar y sobre la presencia de las hermanas clarisas en este convento, una presencia que se extiende por encima de los 500 años. 

Acercarse hasta aquí es hacerlo también a la forma de vida de las hermanas, que se va adaptando de alguna manera a los nuevos tiempos, y de igual modo a la importancia de mantener el Convento de Santa Clara como elemento clave del patrimonio de Los Pedroches. Y la parada obligatoria ayer fue en la tienda donde los visitantes pudieron comprar los dulces que vienen ocupando a las once hermanas que aún permanecen en este espacio. 

Actividades

A lo hasta ahora descrito hubo la posibilidad de disfrutar de la exposición ‘Mira Los Pedroches’, de Moisés Vargas, una colección de fotografías que permite un recorrido por muchos de los lugares más emblemáticos de la comarca de Los Pedroches. Una exposición que quedará para enriquecer a lo que ya de por sí ofrece la visita por el convento. El día finalizó con el concierto de villancicos que ofreció Aliara.