El IES Los Pedroches está inmerso estos días en un intercambio por el que han recibido a veintiún estudiantes procedentes de la ciudad italiana de Florencia. Una experiencia que va más allá de la inmersión lingüística y que ofrece a ambos alumnados  -el español y el italiano- vivir unos días junto a jóvenes de su misma edad. Para enriquecer esta experiencia, el centro educativo ha diseñado un amplio programa donde ha querido resaltar los valores de Pozoblanco a través de su gastronomía, su cultura y sus tradiciones. 

Y precisamente ahí se encuadró la primera de las actividades. El alumnado, nada más aterrizar y conocer a las familias con las que pasarán la próxima semana, participó ayer lunes en un taller de cocina tradicional de la mano de la Asociación de Vecinos ‘La Calzá del Barrio’. Hasta la sede de este colectivo se trasladó el alumnado y también el profesorado para seguir de cerca las recetas tradicionales. A los fogones las mujeres de la asociación, que elaboraron fideos y rosquillos contado con la colaboración del alumnado. Una forma de «romper el hielo» para que los jóvenes pasaran sus primeras horas juntos. 

Así nos lo cuenta Dori Márquez, que junto con Ana García forman parte del equipo directivo del IES Los Pedroches y son responsables del intercambio. «Planificamos la actividad con el fin de que los estudiantes interactúen, también con el objetivo de conectar dos generaciones diferentes y no perder la respondería tradicional», explicaba a este periódico durante el cocinado. Primero, tocó pasar la receta, luego probarlas y, posteriormente, fue el alumnado el que colaboró para elaborar sus propios dulces. 

«Tenemos que vender Pozoblanco con lo que hay y eso es cultura gastronómica, cultura relacionada con las tradiciones… Vamos a visitar Olipe, Covap, el Club Hípico donde se va a desarrollar un espectáculo de doma, a Pedroche a comer migas y luego viajaremos a Córdoba y Granada», nos contó Dori Márquez. La profesora se mostró, además, muy satisfecha por la «amplia» respuesta del alumnado ya que han tenido más de cuarenta solicitudes para un intercambio que no será el único que se realice durante el curso. 

De momento, estos veintiún estudiantes pozoalbenses hacen de anfitriones para viajar el 24 de febrero hasta Florencia y que las tornas se giren. Micaela Picardi, profesora del grupo italiano, nos contaba sus primeras sensaciones en tierras pozoalbenses. «Nos han recibido con mucho cariño, estamos muy a gusto. Creo que esta es una actividad para romper el hielo porque a estas edades todo les da vergüenza y así es una forma de interactuar», puntualizaba Picardi. 

Amplio programa de actividades

Hoy martes los estudiantes se acercarán a parte del patrimonio e historia de Pozoblanco con algunas visitas, además de acercarse a la cultura musical con un recital flamenco. El alumnado italiano conocerá, de igual modo, el funcionamiento del motor económico de la zona con actividades y visitas en torno a la ganadería y agricultura. El conocimiento de la Semana Santa será otro de los puntales del programa, que tiene en todo momento el intercambio lingüístico, cultural y la convivencia entre alumnado y las propias familias.