El tablón de anuncios del Ayuntamiento de Pozoblanco recoge desde el pasado 28 de abril el anuncio de la vacante del puesto de Intervención. Un anuncio que llega tras la aceptación del cese de la persona que hasta la fecha ocupaba ese lugar y cuyo nombramiento tendrá que ser revocado por la Dirección General de la Administración Local de la Junta de Andalucía, según recoge el mismo anuncio. En el texto, además, se comunica a los funcionarios de la Administración Local con habilitación de carácter nacional dicha vacante ante un posible interés en solicitar dicha plaza. Finalmente, en la mañana de hoy viernes, el Ayuntamiento comunicaba el nombramiento de una persona para ocupar este puesto. 

Hasta aquí los puros trámites administrativos, pero esa situación tienen una traducción que ya salpica a numerosos colectivos. De todos es conocido el impago a proveedores que viene arrastrando el Consistorio pozoalbense desde, al menos, el pasado mes de octubre cuando se reconoció que eran diecinueve las empresas afectadas y el importe adeudado ascendía a los 273.000 euros. Una situación de impago que viene ocupando la actualidad pozoalbense desde entonces y, que de momento, no encuentra solución. 

Pero el entramado empresarial no es el único que viene sufriendo ese retraso en el pago de facturas una vez realizado el trabajo encargado, los colectivos pozoalbenses de diferentes ámbitos también están sufriendo la falta de pago de subvenciones. Obviando que el no tener presupuesto ha provocado que no se hayan convocado todavía las subvenciones de concurrencia competitiva de 2022, a muchas asociaciones se les adeuda gran parte de la subvención concedida en 2021, tanto en la parte nominativa como en la de concurrencia competitiva poniendo en jaque muchas de sus actividades, programadas porque se contaba con las diferentes cantidades reconocidas y concedidas. 

A esos dos colectivos, el empresarial y el asociativo, se sumaba esta misma semana el de los trabajadores del Ayuntamiento, que ha visto también un retraso en el cobro de sus nóminas. Habitualmente, los trabajadores suelen cobrar antes de que finalice el mes, aunque esto no ha ocurrido en el mes de abril, que se suma a lo que adeuda el Consistorio. Una situación hecha pública por el sindicato de Policía y confirmada por este periódico. Una incidencia ante la que se solicitó información apuntando que se debía a «un problema de intervención», aunque también se hace hincapié en que la misma debería haber sido puesto en conocimiento de los trabajadores de manera previa.