El éxito del UCAM Balonmano Murcia, que ha certificado su ascenso a la Primera División Nacional, es también el del pozoalbense José Antonio Moreno. Desde hace tres años el entrenador dirige al primer equipo masculino de la entidad murciana viviendo este año un importante hito al conseguir el citado ascenso. El conjunto universitario consiguió acabar primero en una temporada que se vio interrumpida por el coronavirus cuando restaban dos jornadas para su finalización. La decisión de no realizar fase de ascenso por parte de la Federación dejó a los murcianos en la Primera Nacional. 

El bagaje del equipo no ha podido ser mejor para los de José Antonio Moreno ya que a falta de esas dos jornadas sumaban un total de 15 victorias, dos empates y una sola derrota. Treinta y dos puntos que le colocaron por delante de la Asociación Abaranera Balonmano y el Club Balonmano Maristas Ademur y que le dieron el pasaporte necesario para conseguir el ascenso de categoría. «La temporada ha sido muy buena, nos íbamos a jugar el ascenso en el play off que iba a ser en casa por ser líderes e incluso habíamos fichado a jugadores de superior categoría para dar ese salto. Es verdad que es una pena que no se haya podido celebrar la fase de ascenso, pero nosotros estamos muy contentos porque hemos conseguido el objetivo», explica Moreno. 

El entrenador apunta el salto que supone para él tanto a nivel personal como profesional poder llevar a un equipo que competirá ya a nivel nacional. «Es uno de los objetivos que teníamos, estaremos encuadrados en el grupo de Levante jugando contra equipos de Murcia, Alicante, Valencia y Baleares», señala a la par que deja claro que las aspiraciones del club son seguir esa línea ascendente. «Estoy en un club que por suerte quiere vernos en la élite», explica aunque tira de cautela y prudencia para dar ese salto definitivo ya que «la temporada próxima será de consolidación del proyecto y poco a poco iremos haciendo el proyecto más viable posible para poder estar en División de Honor B». 

José Antonio Moreno sigue firme en los objetivos marcados desde que hace tres años se hizo con las riendas de un equipo en el que se siente muy a gusto y en el que cuenta con el respaldo de la Comunidad, el Ayuntamiento y la Universidad. «La Universidad apoya con becas de estudios para los jugadores y eso es muy importante porque nosotros no pagamos todavía a los jugadores, es la única dificultad que encontramos ante equipos que tienen como objetivo el ascenso directo y están haciendo barbaridades a nivel económico». Fuera de eso, José Antonio Moreno ya piensa en su proyecto de Primera Nacional para seguir labrándose su camino en el balonmano, un recorrido que comenzó en el club de su Pozoblanco natal.