Las elecciones municipales provocaron la llegada de nuevos ediles a los diferentes ayuntamientos. Entre los recién llegados a la política de Los Pedroches se encuentra José Luis Cabrera, que revalidó en Alcaracejos la mayoría absoluta cosechada durante años por Luciano Cabrera. Licenciado en Derecho, el regidor llega a la política aportando la visión de una generación que se va cobrando protagonismo a nivel político. Tiene muy claras las líneas de futuro de su localidad, pero también las de la comarca de Los Pedroches porque en ambos radios de acción quiere dejar su impronta.  

Pregunta: ¿Le ha cogido ya el pulso al Ayuntamiento?

Respuesta: Yo creo que sí, estoy relativamente ubicado. La verdad es que me costó trabajo porque vengo de una profesión que nada tiene que ver, los ritmos de la administración son diferentes. Yo soy abogado y estaba acostumbrado a decidir y ejecutar, aquí no tienes que perder el tiempo en ejecutar porque hay gente para ello, quizás el delegar es lo que más me ha costado, pero poco a poco lo voy consiguiendo. Luego, el atender a la gente no me ha supuesto trabajo porque al final son mis vecinos, los que me encontraba antes por la calle, aunque ahora me hacen otros sugerencias o demandas, pero eso no me ha costado. 

P: ¿Cambia mucho la concepción de la política cuando uno está dentro o sigue viéndose igual?

R: Varía mucho. Cuando no estamos en política tendemos a hablar muy ligeramente, solucionamos el mundo muy fácilmente. Lo primero que ocurre es que cuando se toman decisiones no tenemos toda la información o los datos y también que al tomar esas decisiones tienes una gran responsabilidad. Hay cosas que yo criticaba o que no entendía que no se hicieran de manera rápida y cuando estás dentro lo entiendes, porque cualquier decisión hay que sopesarla porque afecta a muchas personas. 

P: Si no me equivoco es usted el alcalde más joven de la comarca, ¿le está siendo fácil la adaptación en un territorio con muchos alcaldes que atesoran ya experiencia en el cargo?

R: La verdad es que no, respecto a los alcaldes compañeros de la comarca ningún tipo de problema, todo lo contrario. Descuelgo el teléfono y cualquiera me atiende, me ayuda. Todo es fácil en ese aspecto, hay buen entendimiento. 

P: ¿Y el llegar con ideas nuevas?

R: En realidad las ideas que tengo a nivel local ya las estamos aplicando, a nivel comarcal tengo ideas, me gustaría hacer cosas y las he propuesto, pero a día de hoy pues no he podido dejar mi impronta porque los ritmos son más lentos. Me gustaría aportar en este sentido también. 

P: Ahora hablaremos de la comarca, pero antes de eso. Me decía que ya está empezando a aplicar sus ideas a nivel local, ¿qué ideas son esas, por dónde pasan sus objetivos como alcalde?

R: Me he encontrado un Ayuntamiento que prácticamente camina solo. A nivel de empleo estamos bastante bien, con 130-140 empleados, pero hay que mirar al futuro y ver la sostenibilidad del Ayuntamiento y del pueblo. Hicimos una convocatoria donde citamos a 115 autónomos, se reunieron casi 90 y tratamos de poner en marcha una asociación de empresarios de la localidad. Cuando hicimos la campaña electoral nos costó reunirnos con ellos porque no estaban organizados y creemos que es importante por temas, por ejemplo, de ayudas. También nos hemos reunido con agentes externos a nivel nacional que puedan tener intereses económicos aquí para fomentar el empleo. Hay varios proyectos relacionados con la ganadería y agricultura que pueden generar trabajo y estamos intentando agilizarle todo lo que está en nuestras manos. La asociación de mayores creemos que tiene que tener mucha importancia, darle vida porque tienen mucho que aportar. También estamos intentando poner en marcha la asociación juvenil, que se perdió, ya está casi configurada la junta directiva, para nosotros es vital porque queremos hacerlos partícipes de nuevas formas de entender la vida. 

Nosotros estamos convencidos de que el futuro pasa por el medio rural, que nosotros no tenemos por qué vender las bondades de esto porque se venden solas y queremos que la gente joven se quite el cliché de que la gente que nos quedamos en el pueblo fracasamos o que tenemos que demostrar que no fracasamos. Queremos que la Asociación Juvenil sea ese canal, se trata de seguir un poco la línea de la Asociación Cívica Hinojoseña, hacer jornadas, que la gente se conciencie de que hay tiempo por luchar por lo nuestro. 

P: Alcaracejos hace tiempo que optó por ser uno de los municipios claves en la atención al mayor, veo que usted tiene ideas también para intentar impulsar otros sectores de la población. 

R: Creo que es una renovación. Luciano ha ido evolucionando con su generación y ha ido solucionando los principales problemas de Alcaracejos. Como eso me lo han dejado tan encaminado, hay margen para preocuparse de otros aspectos, aunque para nosotros siguen siendo capitales las residencias y el mundo del mayor, el trabajo que se hace es increíble, es fundamental porque genera puestos de trabajo y atendemos a nuestros mayores. Hay que seguir, insisto, pero esa línea se ha trabajado muy bien y queremos ocuparnos también de aspectos más acordes a nuestra generación. 

P: Estamos pendientes de las cifras de población, ¿cómo se combate la despoblación?

R: Varias cuestiones a este respecto. Alcaracejos lleva 30 años con 1.500 habitantes, por lo que no es uno de los municipios que pierda población y eso no se produce porque nazcan más niños que personas fallecen, es decir, que no es demográfico. Lo que ocurre que es por cuestiones de empleo u otros factores hemos conseguido retener a la gente y además se nos ha instalado gente de fuera. Nosotros estamos, no tranquilos, pero sí en buena posición, estamos satisfechos a medias. Ahora, eso no quita que sea una preocupación. Hace una semana estuve en Zamora en unas jornadas, «Retos e instrumentos para combatir la despoblación», es decir, la despoblación ya está asumida vamos a ver cómo la podemos revertir. Se dijeron cosas muy interesantes por parte de personas que viven, por ejemplo, en pueblos de cuarenta habitantes. Qué conclusiones saqué, pues que a veces focalizamos todas las soluciones en el tema de infraestructuras y quizás no sea esa la única solución. Zamora, por ejemplo, está muy bien vertebrada pero es que han acercado tanto la capital a los pueblos que toda la gente vive en la capital, todos los hijos estudian y terminan viviendo en Madrid al estar tan bien comunicados. Ellos decían que cuidado a estos aspectos, yo no digo que esté en contra de la autovía, todo lo contrario, pero no todo lo arreglan las comunicaciones. También hablaron del mantra del mundo rural, de lo necesario que es un cambio de mentalidad.

Yo me traje de allí una idea, que la comenté en Mancomunidad. Yo creo que van a venir fondos de Europa para la despoblación, la despoblación está llamada a ser un generador de recursos económicos, nosotros contamos con el hándicap del territorio, como los fondos vienen ligados a la densidad de población nosotros deberíamos ser inteligentes y asociarnos Guadiato, Pedroches, Almadén, Serena y Alcudia. Las cinco juntas hacemos ese radio de kilómetros y población que necesitaríamos para obtener fondos europeos y nos interesa hablar de que el problema de la despoblación no es regional o provincial, los indicadores han de ser de zona y deberíamos aliarnos en este sentido. En esas estoy, intentando buscar soluciones para que tengamos futuro aquí. 

P: La necesidad de hacer comarca, ¿es eso posible cuando día sí y día también se cuestiona el papel de la Mancomunidad?

R: En este aspecto igual que te decía al principio creo que es fruto del desconocimiento. Yo también pensaba que la Mancomunidad no tenía tanto sentido o que no caminaba lo fuerte que tiene que caminar, pero es que en realidad sí es un foro positivo y no hay tanta división como parece. Sí es cierto que puntualmente ha pasado momentos diferentes porque es un órgano supramunicipal que se puede utilizar indebidamente, la habrá utilizado un grupo y otro. 

P: Pero luego se aprueban los presupuestos y esa aprobación queda en un segundo plano por las presencias y las ausencias. 

R: La división no es tal, estamos llamados a ponernos de acuerdo y nos ponemos de acuerdo en todos los asuntos. Todos coincidimos en que el turismo es importante, en que ciertas acciones son buenas para el territorio, al final todos somos alcaldes de pueblos pequeños y miramos por el futuro de todos. El problema es que si hacemos algún tipo de gesto político la gente se queda con eso y lo que se daña es la institución. Creo que la Mancomunidad tiene mucho recorrido y es una oportunidad para nuestro futuro como comarca. 

P: Además de trabajar para frenar la despoblación, ¿qué otras cuestiones son importantes a nivel comarcal?

R: Me gustaría que en la comarca hubiera más coordinación el tema turístico, empresarial, que hubiera más colaboración y que entendiéramos la comarca como una verdadera mancomunidad, no como la institución. Si un pueblo oferta algo que nos aprovechemos, yo creo que los recursos tienen que ir bien dirigidos. Si un pueblo apuesta por una cosa hay que promocionárselo, colaborar, y ya no sólo hablando de fiesta que eso es entretener al pueblo, sino hablando de proyectos de verdad, que generen empleo. Por ejemplo, Añora ha apostado por las nuevas tecnologías en el mundo rural pues vamos a hacer todos que sea referencia; si Pozoblanco tiene una Feria Agroganadera potente o Villanueva la Feria del Jamón, vamos a potenciarlo entre todos. Creo que eso es fundamental y también es importante relacionarnos como pueblos para querer quedarnos, crear redes. Hablaba antes de la Asociación Cívica, pues vamos a contarle a toda la comarca lo que hace. Luego es imprescindible crecer en materia de empleo, si fuésemos capaces de trabajar de manera conjunta para traer empresas, si es que da igual donde se establezcan porque en Covap, por ejemplo, hay personas de toda la comarca, es empleo para el territorio. 

P: Hablábamos antes del fracaso, ¿qué cuestiones son indispensables para que su primer mandato se aleje de esa valoración?

R: Lo voy a decir y puede ser un alma de doble filo. Me dolería mucho perder población significativamente, perder el colchón económico que tiene el Ayuntamiento de Alcaracejos porque venimos de años de estabilidad. Y luego pues no haber avanzado con algún tipo de proyecto, siempre tienes unas ideas que te gustan realizar. También te digo que irme no supondrá ningún problema porque tengo mi profesión. 

P: La última, ¿hay que ser ambicioso para entrar en política?

R: No lo sé. Para entrar en política no lo sé, para ser alcalde de Alcaracejos, no. Lo que hay que tener son ganas de que Alcaracejos siga hacia delante, vivir aquí porque te das cuenta que es un pueblo muy unido y simplemente la gente vale la pena, somos un pueblo con mucha vida vecinal.