La Dirección General de Tráfico llevará a cabo entre los días 6 y 12 de diciembre una nueva campaña de vigilancia y control sobre el consumo de alcohol y drogas en la conducción.

Durante los siete días se intensificarán los puntos de control en todo tipo de carreteras y a cualquier hora del día. Además, con el objetivo de que la campaña se generalice también en las vías urbanas, la DGT invitará a los ayuntamientos que cuenten con Policía Local a que se sumen a la misma, con el establecimiento de controles en sus respectivos cascos urbanos.

Todos estos controles policiales tienen como objetivo prevenir que personas que han bebido o consumido drogas circulen por carreteras y ciudades. Un aumento del número de controles policiales lleva aparejada una reducción en el número de accidentes con víctimas.

Según datos del Observatorio Europeo para la Seguridad Vial (ERSO), alrededor del 25 por ciento de todas las muertes en carretera en Europa están relacionadas con el alcohol, mientras que, aproximadamente, sólo el 1 por ciento del total de kilómetros recorridos son conducidos por personas con 0,5 g / l de alcohol en la sangre o más. A medida que la concentración de alcohol en la sangre (BAC) aumenta en el conductor, la tasa de incidencia de accidentes también se incrementa. No sólo la tasa de incidencia de accidentes aumenta rápidamente con el aumento de la tasa de alcoholemia, el accidente también se vuelve más grave.

Aún con tasas de alcoholemia dentro de los márgenes legales permitidos, nuestro nivel de riesgo de accidente de tráfico puede verse incrementado. La única tasa segura es 0,0 por ciento. 

En la campaña realizada del 7 al 13 de diciembre de 2020 se controlaron a 1.133 conductores, de los cuales el 2,3 por ciento fueron positivas.