El pozoalbense Pablo Lozano, actual presidente de la Real Federación Andaluza de Fútbol, se ha convertido en vicepresidente de la Real Federación Española de Fútbol convirtiéndose, de este modo, en un hombre clave en la estructura federativa presidida por Luis Rubiales.

Por otro lado, también se han acordado los nombramientos del actual vicepresidente primero de la RFAF, José Manuel Molina Maza como vocal de la junta directiva, cargo que también ostentará la vocal deportiva de la RFAF, María Martos. Para la Federación Andaluza, todos estos nombramientos son «una muestra de la confianza en el trabajo y el nuevo impulso de modernización que desde la RFAF se está llevando a cabo en favor del fútbol y el fútbol sala andaluz para el resto de España».

Pablo Lozano llegó a la cúspide de la Federación Andaluza en junio de 2019 cuando Eduardo Herrera renunció al cargo después de 33 años en el mismo. No fue hasta julio de este mismo año cuando puso fin a su interinidad y fue refrendado en el cargo por unanimidad en la Asamblea General de la Federación. Antes de llegar a este punto, Lozano fue vicepresidente adjunto de la RFAF, delegado provincial en Córdoba, presidente de la Comisión Andaluza de Fútbol Sala, vicepresidente de la Comisión Nacional de Fútbol Sala y presidente de la Subcomisión Nacional de Fútbol Sala Femenino.