En la mayor extensión de dehesa de Europa es inevitable que los problemas que acechan a este ecosistema estén en primera línea de la actualidad por ello en la comarca de Los Pedroches el sector agroganadero mira muy de cerca al que se ha denominado como el ‘cáncer de la dehesa’ que no es otro que la seca de las encinas. Una enfermedad originada por la acción de un patógeno que entra por las raíces impidiendo que los árboles absorban el agua y los nutrientes y provocando su seca. Ese es uno de los factores causantes de una enfermedad que tiene otras variantes como la salud del suelo según el último estudio realizado por la Universidad de Córdoba y el Instituto de Investigación y Formación Agraria y Pesquera de Andalucía.

Hace unas semanas en la comarca de Los Pedroches se abordó la seca del encinar por estar ante un ecosistema que es clave en la zona por su incidencia en el engorde del cerdo ibérico en la época de montanera lo que convierte a la dehesa en un factor clave en uno de los motores económicos de la comarca. Se hizo de la mano de Antonio Romero, director técnico de Abecor, una empresa de aplicaciones medioambientales de Córdoba, y Jesús Tello, director de operaciones de Fertinyect, empresa que ofrece soluciones endoterapeúticas específicas para los principales problemas que afectan a la dehesa, entre ellos, la seca de la encina.

“Lo que planteamos es un plan de desarrollo para abordar esta problemática teniendo entre las principales ofertas un sistema que ya está patentado”, explica Romero. La patente a la que se refiere hace mención a un sistema de inyección al tronco de los árboles que “permite que introduzcamos los productos directamente al sistema vascular del árbol en lugar de la utilización de aplicaciones foliares que gastan mucho agua y difunden los contaminantes al medio ambiente”, apunta Jesús Tello que detalla el sistema propuesto a empresas y ganaderos particulares permite “acceder directamente, digamos, a las venas del árbol, es como comparar una pomada con una inyección. Estamos hablando de un sistema que mejora la eficacia y tiene unos importantes beneficios a nivel medioambiental”.

Ambas empresas trabajan de la mano para intentar aplicar este sistema en la comarca de Los Pedroches siendo uno de los stands que más información ofreció a lo largo de la Feria Agroganadera por lo novedoso y lo importante de un sistema que no sólo serviría para prevenir la seca, sino para curar a las encinas que ya están afectadas. “Los estudios determinan que una encina afectada en un 50 por ciento puede recuperarse, pero también hablan de que se podría actuar en árboles afectados hasta en un 75 por ciento”, apunta Tello. Además de los propios análisis de la empresa, el mejor baluarte de este sistema es su puesta en marcha en Portugal para tratar al alcornoque. “En Portugal el Estado puso soluciones por la importancia del sector del corcho en la economía y lleva aplicando este sistema desde hace quince años”, determinan.

En cuanto al coste económico, Tello matiza que “no es limitante porque estamos hablando de una aplicación cada 2-3 años para un beneficio directo”. Las soluciones son confeccionadas de manera personalizada ya que antes de su aplicación se hace un proyecto de carácter previo porque “se hace un tratamiento de focos, no se trata toda la finca. Hacemos un diagnóstico, una identificación del patógeno con equipos especializados y luego se procede al tratamiento de los focos afectados”, finaliza.