Se explicaba en uno de los catorce escenas de los ‘Mayos’ que se pudieron ver ayer domingo en las calles de Pedroche. «Hacer un ‘Mayo’ no tiene dificultad, primero se tiene la idea que luego hay que plasmar; que la escena se entienda ya sea satírica, moderna o tradicional; caras y manos de trapo ¡lo que más trabajo da!; si el conjunto resulta vistoso ¡alegría general!; luego pensar en la cartela y si los muñecos van a hablar», esas son las claves para realizar los muñecos de trapo que dieron vida a numerosas escenas cotidianas o tradicionales. Eso sí, «no solo es montar y trabajar, sino los buenos momentos que nos da, aunque con el virus menos que años atrás». Y una recomendación para los visitantes, «a la hora de valorar, desprecio a ninguno, que sabemos el trabajo que traen detrás». 

Con esas reglas que quedaron escritas y se pudieron leer en una de las creaciones, las calles de Pedroche despidieron en la jornada dominical el quinto mes del año con sus tradicionales ‘Mayos’. Entre las escenas propuestas se recrearon, a través de los muñecos de trapo, estampas de la vida cotidiana, oficios, la escuela de doña Emilia, en recuerdo a una maestra de la localidad de los años 70, los piostros, e incluso hubo quien optó por destacar el mundo del toro con una plaza incluida. 

Una fiesta que llenó de color las calles de Pedroche, especialmente los catorce lugares señalados para completar la visita y que aglutinaron más de 60 ‘Mayos’. Hubo premios, entregados por el Ayuntamiento de la localidad, y que fueron a parar para la calle Torreón, 12 con su recreación de los piostros que le otorgó los 300 euros del primer premio; el segundo, dotado con 250 euros, fue para la calle Real; mientras que la calle El Olivo, con su plaza de toros, consiguió el tercer premio de 200 euros; y finalmente la calle Miguel Ruiz y la Calle Monjas recibieron el cuarto y quinto premio, respectivamente.