La Plataforma para la Defensa de las Personas Mayores y Dependientes sigue con su actividad fijándose como una acción la recogida de firmas encaminada a demandar el inicio de la construcción de la residencia de mayores en Pozoblanco este mismo año. Un paso que viene dado después de conocer el informe de necesidades presentado al Ayuntamiento y que, si bien la Plataforma valora por reafirmar sus demandas, el colectivo ve insuficiente por llegar de manera «tardía» y por entender que el proyecto necesita de un empuje que permita su desarrollo a corto plazo. 

Además de esta recogida de firmas, la Plataforma ha vuelto a remitir un comunicado en el que indica que «nos satisface que el estudio de necesidades haya confirmado la indiscutible y urgente necesidad de construir la nueva residencia de mayores, nos alegramos porque ahora nadie podrá cuestionar que la residencia es necesaria y además urgente». El comunicado avanza afirmando que en la reunión donde se dio a conocer ese informe, la plataforma expuso no estar de acuerdo respecto al número de plazas concertadas que se determinan necesarias «puesto que se habla del 49 por ciento sin tener en cuenta las bajas pensiones e gran parte de la población y que un 71,4 por ciento de los encuestados afirma que no podría costearla». 

En este punto, el colectivo demanda que «se piense en una residencia que puedan disfrutar los mayores del pueblo, que esté al alcance de la economía de quienes van a ocuparla para que puedan disfrutarla no solamente quienes puedan pagar una plaza, sino todos aquellos que la necesiten». Del mismo modo, la plataforma alega que una vez constatada la necesidad y finalizados los trámites del cambio de uso del terreno es necesario que «se den ya los pasos necesarios y dispongan los recursos suficientes para que se comience a construir en 2021″ recordando que en la actualidad la partida presupuestaria habilitada para este fin es de 580.000 euros. 

Del mismo modo, la plataforma vuelve a hacer hincapié en la necesidad de hacer un calendario «objetivo, realista, alcanzable y con fechas de verdad, a diferencia del anterior, un calendario al margen de fechas electorales y que se cumpla puesto que ya han transcurrido casi dos años desde que se prometió». El colectivo cierra su comunicado indicando que «no se aceptarán más excusas» para dilatar un proyecto «prometido y necesario».