Los plenos ordinarios en el Ayuntamiento de Pozoblanco vienen precedidos por una sesión de carácter extraordinario donde los corporativos muestran de manera pública su condena a los actos de violencia de género. Un acto que se viene realizando a las puertas del Consistorio y junto a la Asociación de Mujeres Ventana Abierta, además de la ciudadanía que quiera sumarse a esta concentración. Desde ayer, ese modelo de pleno variará ya que la sesión de condena a la violencia de género se realizará en el salón de plenos, en lugar de a las puertas del Ayuntamiento. Una decisión algo controvertida que no ha gustado a todos los grupos de la oposición y que ayer manifestaron su disconformidad. En ese sentido, la asociación Ventana Abierta mantuvo su concentración y a la misma se sumaron los ediles de PSOE, Ciudadanos e IU. 

Así, la portavoz socialista, Rosario Rossi, criticó que la nueva fórmula no había sido comunicada a los concejales de la oposición, que al parecer no habrían recibido la citación al Consejo de la Mujer donde se acordó este cambio por un error. Rossi indicó que «quiero romper una lanza a favor de la asociación Ventana Abierta porque cuando no existía Centro de la Mujer, era esta asociación que asesoraba e incluso acogía a las víctimas de violencia de género». La portavoz acusó al equipo de gobierno de dar la espalda a las víctimas, una acusación ante la que el primer edil, Santiago Cabello, solicitó una rectificación. Sin embargo, Rossi mantuvo sus declaraciones. 

De manera previa a la celebración del pleno, el Consistorio emitió una nota de prensa comunicando que se mantenía el acto de condena pero que desde el mes de febrero se llevaría a cabo en el salón de plenos. A este respecto, la concejala de Igualdad, Inmaculada Reyes, expresaba que se trata meramente de un cambio de lugar y que en el acto se seguirá manifestando la repulsa y condena del Ayuntamiento hacia la violencia de género y a continuación se pasará a leer la relación de víctimas acontecidas desde el último pleno. También puso de manifiesto que desde el Consistorio se continuará trabajando en erradicar esta lacra social, «al margen de ideologías, concienciando y sensibilizando a la población y con formación a profesionales que estén implicados en la atención a las víctimas de violencia de género». 

Unas explicaciones que no convencieron a las integrantes de Ventana Abierta que lamentaron que después de quince años se rompiera con el consenso respecto a esta cuestión. La presidenta del colectivo, Tránsito Habas, lamentó que «no se nos haya comunicado nada y que tengan que rebuscar en cajones de 2006 para encontrar un argumento». «El equipo de gobierno ha decidido unilateralmente que no se va a concentrar más con la población, está claro que hay ideología política cada vez más inclinada hacia una derecha ultra, llevamos quince años manifestándonos todos los meses y vamos a seguir haciéndolo con o sin equipo de gobierno», apuntó. 

Lo cierto es que después de décadas de consenso en el día de ayer esa unidad se rompió y de nuevo se escucharon acusaciones que dejan en un segundo plano la cuestión prioritaria, la violencia de género que sigue dejando víctimas mes tras mes.