El sindicato de Enfermería Satse-Córdoba ha denunciado, lo que su juicio, es «una grave situación y deterioro de la atención sanitaria» que se está produciendo en los tres hospitales de la provincia como consecuencia de la falta de enfermeras en muchas unidades hospitalarias para «garantizar una atención sanitaria y cuidados en óptimas condiciones de seguridad y calidad». 

El sindicato asegura que «tras un detallado estudio» en el Hospital Comarcal Valle de Los Pedroches «no se contrata para dar cobertura a la ausencia de enfermeras por causa de enfermedad o de reducciones de jornada para cuidados de menores o personas mayores». En este sentido, se resalta «un déficit permanente de entre 8 y 10 enfermeras para dar cobertura a dichas situaciones». 

Del mismo modo, según el estudio realizado por el sindicato, el equipo de urgencias quirúrgicas, que por razones de seguridad y evitar riesgos añadidos en las intervenciones quirúrgicas de urgencias ha de disponer de dos enfermeras de manera permanente e ininterrumpida, «con frecuencia solo dispone de una en el turno de mañana». «Tampoco la hospitalización de dicho Hospital escapa a la falta de enfermeras, así por ejemplo es muy frecuente que en la Unidad de Cirugía una sola enfermera tenga que asumir su trabajo en evidente situación de riesgo asistencial ajeno al profesional pues ha de hacerse cargo de 15 pacientes, algo que pone en claro riesgo la seguridad de los pacientes en dicha Unidad», finaliza el sindicato respecto a la situación del Hospital de Pozoblanco.  

Finaliza el sindicato recordando las palabras de la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, afirmando que «los hospitales están posponiendo la atención sanitaria debido a la falta de enfermeras», un problema que «ya se puso de manifiesto durante el Foro Económico Mundial donde se subrayó la gran escasez de enfermeras que sufren los centros sanitarios», algo que para Satse «no solo no es una cuestión irrelevante, sino que los directivos de la sanidad pública cordobesa deberían considerar responsablemente en lugar de ignorarlos y poner en riesgo la seguridad de los pacientes y también la salud laboral de las enfermeras de nuestros hospitales».