El sindicato profesional de enfermería Satse ha exigido que los centros de salud y consultorios de los distritos de atención primaria del Área Sanitaria Norte y Área Sanitaria Sur de la provincia de Córdoba no se cierren en horario vespertino durante los meses de verano. Dicho cierre afectaría de lunes a viernes en horario de 15 a 20 horas y mayoritariamente desde el 1 de julio al 15 de septiembre. «Estos son  los cierres de centros de Salud que cada año ha impuesto la Administración Sanitaria», explica Satse que espera que el gobierno de la Junta de Andalucía «mantenga abiertos dichos centros de salud con los medios y recursos necesarios para la atención sanitaria». En concreto, en el Área Sanitaria Norte de la provincia se cerraron en 2018 los centros sanitarios de Peñarroya, Hinojosa del Duque, Pozoblanco y Villanueva de Córdoba. 

Satse afirma que este cierre masivo de centros de salud y consultorios tanto en la provincia de Córdoba como en la capital, durante el verano de 2018, «obedecía a la obsesión enfermiza del Servicio Andaluz de Salud de ahorrar dinero a costa de detraer recursos y servicios en la  atención sanitaria a los ciudadanos, valoración ésta que se compartía y criticaba año tras año desde quienes ahora gobiernan en la Junta de Andalucía, por lo que desde el sindicato de Enfermería exigimos que este verano sea diferente en cuanto a la atención sanitaria y cuidados a la población en nuestra provincia durante los tres meses de verano». Afirma Satse que «el cierre de centros sanitarios pone en jaque la accesibilidad del ciudadano a los centros sanitarios, a los que se les dificulta recibir atención sanitaria y cuidados ante un problema de salud durante varios meses».  

Finaliza el sindicato exigiendo que «los recortes sociales en sanidad cesen inmediatamente y no se castigue un año más a pacientes y ciudadanos con una sanidad cada vez más empobrecida y  descapitalizada asistencialmente, carente de recursos y medios. Todo ello impuesto hasta ahora desde la Administración Sanitaria de la Junta de Andalucía,  alejada de las necesidades reales de pacientes y profesionales e impregnada  de una preocupante insensibilidad social y humana».