El Área Sanitaria Norte ha realizado hoy martes una acción encaminada a la sensibilización e información con motivo del Día Mundial de la Prevención del Suicidio. Las personas que han acudido hoy al Hospital de Pozoblanco han recibido un tríptico informativo con el objetivo de hacer visible un problema que sigue siendo un tabú, lo que no impide que sea la principal causa externa de mortalidad en España. Según los datos aportados desde el Área, anualmente en el mundo se registran un millón de suicidios lo que viene a significar una muerte casi 40 segundos. En España, esas cifras hablan de más de 3.500 personas que se suicidan al año, lo que viene a significar 10 muertes al día.

La necesidad de hablar, de dejar a un lado los tabúes y los mitos son las principales claves aportada por Esperanza Pietro, psiquiatra del Área Sanitaria Norte que nos explicaba que “estamos haciendo una campaña de sensibilización a la población para que conozca el problema porque parecen que las muertes por suicidio son silenciadas y no ocupan lugar en las agendas políticas y sanitarias y estamos ante un problema muy importante porque se trata de un problema de salud pública que afecta a muchísima gente”.

Un problema cuya evolución en el tiempo se puede ver a través de las estadísticas oficiales y que recogen que “las cifras de suicidios se han mantenido constantes a lo largo del tiempo, es un problema que está causando bastante inquietud porque no se trata, no se habla de ello y es un tabú en la sociedad”. Pero, ¿qué recomiendan los profesionales para eliminar ese silencio? Hablar. “Al igual que con los accidentes de tráfico, es bastante importante sensibilizar, hacer campañas de prevención. Es importante también trabajar de forma específica sobre el problema y para ello es imprescindible que se forme a nivel de personal sanitario y también a profesionales como bomberos, policías o medios de comunicación. Si se habla de una manera firme, sin dar detalles escabrosos, es un tema que se puede y debe abordar”, apunta Prieto.

Entre la información aportada a la población se ha hecho hincapié en las señales de alerta que pasan por el habla sobre el suicidio, la muerte o comentar los deseos de morir, las autolesiones, los cambios de humor, comportamiento y rutinas o el aumento del consumo de tóxicos. “Es importante hablar de una serie de mitos que hay en torno al suicidio. Se dice que el paciente que se quiere suicidar lo hace y eso es falso porque lo que el paciente quiere es dejar de sufrir ante un sufrimiento existente muy importante, se le puede ayudar, darle otra visión de lo que está pasando”, explica la psiquiatra que también deja un dato claro “el 80 por ciento de los pacientes que han materializado un suicidio lo habían verbalizado de manera previa”.