La residencia Virgen de Luna de Villanueva de Córdoba vivió hace unos días una jornada de formación para obtener el sello de Calidad+Humanización basada en la empatía ante el residente. Y es que en dicha formación, los trabajadores pudieron sentir cómo es vivir con las patologías asociadas al envejecimiento. 

Eso fue posible gracias al traje NHuma que simula situaciones de dependencia como la hemiparesia, la dificultad en la movilidad, el déficit visual o el temblor de la enfermedad del Parkinson.

El objetivo principal, es que los trabajadores empaticen con los usuarios del Centro para poder entenderlos y darles una atención de calidad. «Vivir estas experiencias nos hace darnos cuenta de las vivencias de cada uno de nuestros usuarios», explican desde la residencia. 

Esta formación forma parte del proyecto “Centros con alma , vidas con sentido”, en el que se enfatiza en dar a los residentes una atención centrada en la persona, en la que cada mayor reciba un trato de máxima calidad , personalizado y adaptado a sus gustos y preferencias.