El pasado martes, Baldomero García comunicaba que había enviado una carta al presidente del PP de Córdoba, José Antonio Nieto, en la que presentaba su dimisión al frente del partido en Pozoblanco. Un día después, Nieto tendió una mano a García que éste no ha tomado y ha dejado claro, con una nueva misiva que ha mandado a todos los afiliados del partido en Pozoblanco, que su renuncia es “irrevocable” como ya había avisado el martes.

En la misiva, García vuelve a plantear una cronología de los hechos que han provocado que tras ser reelegido como presidente del PP pozoalbense en 2013 no acabe su mandato y presente una dimisión que viene a alejar al que fuera alcalde de la localidad entre 2009-2011 de la política. En esta segunda misiva, García dice no querer eludir responsabilidades y explica con más detalle la situación que se ha vivido en el seno del partido en los últimos tiempos.

Así, García indica que “ni voy ni quiero eludir la responsabilidad que como presidente local tengo. Mis decisiones han sido mías, he escuchado a mis compañeros, sus consejos y sus críticas que de todo ha habido, pero las decisiones tomadas consensuadas o no, las he tomado yo, fruto de las cuales ha habido aciertos y muchos errores, no me cabe la menor duda. Pero con toda sinceridad y honestidad, y convencidos de que mi salida era inevitable, creí que haciendo los cambios y arreglos necesarios el proyecto seguiría adelante”.

Sigue relatando en la carta enviada a la militancia que “descartada la opción de encabezar la candidatura a las municipales, hablé con algunas personas de Pozoblanco, profesionales todos cuya responsabilidad unida al rechazo general hacia la política, les hizo declinar la invitación. Fue entonces cuando tomé la determinación de que alguno de los concejales o de la ejecutiva tomara el relevo”. Un relevo que acepta Ventura Redondo que “decide aceptar el reto aun a costa de posibles sacrificios personales y profesionales. Su responsabilidad, su dinamismo, su trabajo incansable y su abrumadora inteligencia no hizo sino transmitirnos la ilusión y las fuerzas renovadas que íbamos a necesitar. Hubiera sido el candidato perfecto y contaba con el apoyo incondicional de casi toda la ejecutiva local”.

De nuevo García hace hincapié en la tardanza del siguiente paso, el beneplácito por parte de la ejecutiva provincial, afirmando que “hacía un mes que había hecho llegar el nombre de Ventura Redondo como candidato a la ejecutiva de Córdoba. El tiempo corría y nadie me comunicaba su aceptación y no fue hasta la tarde del miércoles 8 de abril cuando se persona ante la ejecutiva local Salvador Fuentes en su condición de presidente del Comité Electoral Provincia. Viene buscando un “mirlo blanco” según sus propias palabras, se le expone la situación y quedamos en confeccionar el resto de la candidatura”.

El jueves 9 de abril a primera hora de la mañana Salvador Fuente, vía telefónica, le confirma a Ventura Redondo que es el candidato, momento a partir del cual y con una actividad frenética comienza a confeccionar su lista contando con nuestra colaboración. El domingo 12 de abril, Ventura se reúne con Salvador Fuentes en Córdoba y de esa conversación saca en claro que varias personas de su máxima confianza y apoyo le son rechazadas, le exige que las saque de la lista y le recomienda la inclusión de otras, instándole a que se una a Manolo Cabrera (el mismo que nos comunicó que no acompañaría a Ventura porque no era su proyecto) para la configuración de la candidatura. Lo hace y no obtiene su apoyo, aún así Ventura continúa sumando importantes personas a la candidatura, pero las presiones continúan en sucesivas conversaciones cuyo tenor queda sólo para Ventura, la gravedad de los hechos y de los dichos le hacen renunciar a ser candidato a las elecciones municipales por el Partido Popular en Pozoblanco en la mañana del martes 14 de abril de 2015”, prosigue la carta a la que ha tenido acceso este periódico.

Una renuncia que García achaca a “las continuas interferencias, la exigencias e imposiciones del señor Fuentes en la confección de la candidatura” que para el ya ex presidente “sobrepasan sus atribuciones”. Por todo ello, la carta finaliza indicando que “las continuas interferencias, unidas a la falta de respaldo y comunicación con la Ejecutiva Provincial, a pesar de que en el trascurso de estos días he realizado varias llamadas que no obtuvieron respuesta, me hacen tomar la triste decisión de dimitir del cargo de presidente Local del Partido Popular en Pozoblanco”. “A algunas personas les ocurre que los árboles les impiden ver el bosque, sin darse cuenta que esos árboles, aunque estemos en las orillas, formamos parte del bosque”, cierra García.