Las reacciones a la noticia deportiva de la semana, la retirada del primer equipo del Club Balonmano Pozoblanco de la Primera Nacional, no se han hecho esperar. Pocos después de que hoyaldia.com adelantara la noticia, los jugadores emitían un comunicado en el que daban su versión de los hechos. Un comunicado donde se asegura que «ningún miembro de la directiva» ha informado de la situación a los jugadores, así como que la plantilla entiende que el motivo de esa retirada no es exclusivamente económico, sino que lo atribuyen a una «falta de profesionalidad, interés y desgana por parte de la directiva». 

Así, el comunicado arranca con los jugadores asegurando que «ningún miembro de la directiva nos ha informado de la decisión unilateral de retirar el equipo de la competición, teniendo que enterarnos a través de la prensa. Consideramos que ha sido una falta de respeto y una desconsideración ante un grupo de jugadores que no hemos dejado de entrenar y competir hasta el momento en el que se nos ha negado la entrada al pabellón«. 

«De igual forma, queremos desmentir que el único motivo de la retirada del equipo haya sido económico. Tal y como hemos sabido, por parte del director deportivo, después de conocer la noticia, han sido varios los empresarios pozoalbenses y cordobeses que se han ofrecido de forma desinteresada para plantear diferentes alternativas y que el club pudiera hacer frente a la falta de ingresos. Pero la respuesta por parte de la directiva siempre fue negativa. Por lo que consideramos que el motivo real de la retirada del equipo de la competición ha sido la falta de profesionalidad, interés y desgana de la directiva«, prosigue el comunicado. 

Los jugadores alegan que «ya que en ningún momento se nos planteó la posibilidad de retirar el equipo de la Primera División Nacional de Balonmano, tampoco se nos han planteado opciones para poder continuar en dicha competición. Opciones que, al igual la temporada pasada, en la que ya tuvimos que firmar un acuerdo de deuda por falta de pagos, hubiésemos estado dispuestos a aceptar de nuevo. Predisposición por nuestra parte conducida por las situaciones laborales, familiares y de estudio, siempre adaptadas a nuestra gran pasión, el balonmano«. 

En la parte final del escrito, la plantilla cuestiona «qué va a hacer la directiva con los compañeros sudamericanos que de la noche a la mañana se quedan a miles de kilómetros de casa sin su única fuente de ingresos. Qué pasa con el dinero de los abonos vendidos a familiares, amigos y resto de aficionados. O con el dinero aportado por los distintos patrocinadores«. Por último, los jugadores piden «recibir los pagos que están pendientes de cobro, tanto a los jugadores de la actual plantilla como a los jugadores de la temporada pasada que aún están a la espera de recibir parte de su salario acordado«.