Se hace grande desde el escenario, un lugar desde el que desprende una personalidad que consigue atraer la atención de quien la escucha, pero María José Llergo es mucho más que una voz. Esta joven pozoalbense sigue dando pasos en el mundo de la música desde la base, la formación, pero también buscándose en su propio camino. Hace unos meses presentaba un primer videoclip, «Niña de las Duñas», tema escrito por ella donde demuestra una evolución vocal palpable además de seguir ahondado en esa personalidad que ahora también queda plasmada en sus letras. Con ella hablamos hoy de su música y sus aspiraciones.

Pregunta: ¿De dónde nace ‘Niña de las Dunas’?

Respuesta: ‘Niña de las Dunas’ tiene su propia historia, real, bella y triste. Pero me la reservo para mí, porque me gusta dejar que el oyente tenga la libertad de imaginar y buscarle sentido a la letra, que además es muy gráfica. Es lo que pasa con las canciones, cuando salen de tu boca, ya no te pertenecen a ti, sino a quien que las escucha, relacionándolas con su experiencia propia.

P: ¿Cómo fue el trabajo de realización del videoclip, qué quisiste transmitir?

R: El rodaje fue un sueño. Estamos muy orgullosos del resultado y yo estaré siempre agradecida a Cortijo Films por esta oportunidad. Es un orgullo que ‘Niña de las Dunas’ haya nacido en mi tierra con el amor y el arte de mi gente. Y aunque no teníamos nada, nos entregamos en cuerpo y alma para obtener el mejor de los resultados.  Cuesta creer que hayamos tenido presupuesto cero.

Visualmente quise reflejar la comunión entre mi origen, cultura y tradición andaluza, y el tiempo en el que vivimos, la escena urbana actual. Creo que esta dualidad es perceptible también en mi música, y en mi forma de ver el mundo. Hay que saber de dónde vienes para saber a dónde vas.

P: ¿Con qué pretensiones editas este primer videoclip?

R: Más que pretensiones, es una intención: compartir con el mundo ‘Niña de las Dunas’.

P: Durante años hemos podido conocer tu faceta como una buena intérprete, sin embargo ahora te presentas como una artista mucho más completa con temas propios y con un giro musical con mucha personalidad, ¿hacia donde caminas en el mundo de la música?

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Fotografía: África Villén

R: Creo que lo importante es caminar. Día a día, con dedicación, amor a lo que haces y dando lo mejor de ti. Lo demás no depende mí, sino de la vida. Lo que sí procuro es disfrutar del camino, y aprender de cada paso, con libertad, humildad y siendo fiel a mí misma.

P: Sigues en Barcelona formándote, ¿en qué estás implicada en la actualidad?

R: Ahora mismo sigo combinando mi formación académica, con actuaciones y colaboraciones con otros músicos, además de mi proceso creativo. El panorama artístico de la ciudad está en ebullición, estar aquí es un aprendizaje continuo.

P: ¿Qué te han aportado a nivel artístico estos años de formación?

R: Muchas cosas, tanto en calidad de recursos técnicos como teóricos. Valoro mucho mis estudios y creo que para ser personal artísticamente primero tienes que conocer la tradición y estudiarla en profundidad. El estudio y la documentación son esenciales para fundamentar tu arte. Pero de lo que más aprendo es de la gente que me rodea, músicos y artistas de otras disciplinas que luchan por su arte, trascienden e inspiran. ¿Qué sería del mundo sin ellos? Somos afortunados de tenerlos.

P: ¿Cómo es el proceso creativo que te lleva a escribir y de qué te gusta hablar en tus canciones?

R: Depende. En ocasiones dejo un trozo de mi vida en el papel, otras un trozo de la vida de otros, así como algunas veces viene a ti la música y la letra a la vez, y otras veces es una idea, que necesita ser desarrollada. En todo caso, pienso que componer, es un proceso de entrega a la música, yo le pertenezco a ella, no ella a mí. Siempre partiendo de un sentimiento verdadero.

P: ¿Qué te supone que en tu pueblo tengas tanta gente que admira tu trabajo?

R: Mucha emoción… Llevaba mucho tiempo sin cantar en Pozoblanco, y ver que hay tanta gente que no me pierde de vista aunque esté fuera, es muy emocionante. Es una alegría inmensa poder compartir tu trabajo con tu gente y recibir tanto amor y apoyo. Yo lo vivo como una oportunidad para aportar lo mejor de mí al lugar que me vio nacer. Es mi manera de devolverle a mi tierra, parte de lo que ella me da a mí. Muy emocionante

P: ¿Cuál es ahora mismo tu meta en el mundo de la música?

R: Mi único propósito es hacer música sincera. Cantar desde el alma, a través del alma de cada canción  y en dirección al alma de quien me escuche.