El atractivo de la primera jornada del Congreso Nacional del Cerdo Ibérico estaba en conocer la iniciativa de primera mano y, por supuesto, acercarse a la cocina de chefs como Kisko García y Albert Adriá, ambos con estrellas Michelín y que han mostrado las variantes de su cocina a través de sendos ‘shows cooking’ que han permitido a los asistentes conocer de primera mano la forma de trabajar de ambos cocineros. García y Adriá han utilizado productos ibéricos en algunas de sus elaboraciones y han dejado pinceladas también de su forma de entender la cocina.

El catalán Albert Adriá ha abordado una presentación de doce elaboraciones en las que ha utilizado muchos de los productos del cerdo ibérico. Antes de su encuentro con el público, Adriá ha explicado que «el cerdo ibérico ya aporta a la alta cocina ya que está más de moda que nunca, tanto la utilización en salazones como las piezas del cerdo que el cliente demanda». Respecto a la funcionalidad de congresos de este tipo, el chef ha explicado que «ayudan para dar a conocer aún más el producto y también para que se diferencie lo que es ibérico de lo que no».

En esa misma línea se ha pronunciado Kisko García, que ha asegurado que «el posicionamiento del cerdo ibérico de Los Pedroches es muy algo teniendo un fuerte impacto internacionalmente y también a nivel nacional». «Estamos hablando de un producto exclusivo, de calidad, del que no podemos desprendernos tanto por lo que ofrece como por la dedicación de la zona y de las familias que se dedican a esta producción», ha expuesto el chef.

Necesidad de trabajar el turismo asociado a la gastronomía

Además de las puestas en escena a nivel gastronómico, la primera jornada también ha contado con dos mesas redondas que han analizado la situación del sector gastronómico y agroalimentario y la rentabilidad del producto en la restauración. En el contexto de esta última mesa redonda, se han resaltado los lazos de unión entre gastronomía y turismo haciendo hincapié en la existencia de un producto de altísima calidad pero también en la necesidad de trabajar los aspectos que vengan a mejorar el turismo. En esa línea, se ha defendido apuestas como una mejor señalización de la zona y de la ruta del ibérico, una red de tiendas o rutas que permitan conocer la dehesa.

Otra apuesta del Congreso han sido los talleres que en esta primera jornada han permitido aprender sobre productos ibéricos, la evolución del salmorejo o acercarse a los dulces tradicionales. Talleres que se han desarrollado de manera paralela al resto de actividades y que tendrán su continuidad en el día de mañana.