Metido otra vez en problemas tras encadenar cuatro derrotas consecutivas, el Balonmano Pozoblanco recibe mañana en el Juan Sepúlveda (18:00 horas) al Meridiano Antequera. Un derbi andaluz que mide a dos equipos con retos distintos: abandonar cuanto antes las plazas de play-off de descenso en un caso y apurar las opciones de pelear por la sexta plaza en otro.

Con Alonso Ruiz disponible en principio en un plantel sin más bajas esta semana que las de larga duración, Carreño, Mathieu y Adrián Santamaría, el plantel vallesano es consciente de lo que hay en juego en un partido que en la Copa de Andalucía, en el lejano verano, acabó con victoria local.

«Volvemos a jugar en casa y necesitamos con urgencia puntuar», admite el entrenador del Pozoblanco, Miguel Ángel Moriana. «Todos somos conscientes de ello y de la importancia de este partido».

Un duelo que el entrenador espera «difícil» porque «ellos son un gran equipo que pese a todos los problemas que están teniendo están siendo bastante regulares en la liga. «Para mí tiene una de las mejores plantillas de la categoría», añadió.

A ese plantel se han reintegrado cuatro hombres que estaban expedientados por una supuesta falta de indisciplina, José Carlos López y Alejandro Rubiales, ambos exjugadores del Pozoblanco, Fernando Quintana y Alexis Ruiz. El entrenador es Quino Soler, otro exvallesano, que ahora dirige los designios del equipo junto a Lorenzo Ruiz. Todo ello bajo el auspicio de una gestora que ha sustituido a la antigua directiva del club.

Cuatro victorias y un empate a domicilio

El cuadro malagueño llega al partido con un balance de 12 victorias, 3 empates y 9 derrotas, contando como una de ellas la no comparecencia para jugar en Zarautz. Fuera de casa ha ganado ante Sinfín (23-36), Barcelona B (28-31), Benidorm (22-23) y Octavio (29-34), ha empatado contra Torrelavega (27-27) y ha perdido ante Teucro (35-24), Barakaldo (35-33), Bordils (35-31), MMT Seguros Zamora (37-30) y Alcobendas (33-19).

«Debemos estar muy acertados en defensa y tener las ideas claras en ataque para evitar comentar fallos», asevera Moriana, que espera que la piña que es el plantel sirva para tirar del carro. «Cada partido que pierdes te afecta anímicamente, pero los equipos se demuestran cuando saben salir de estas situaciones precisamente así, como equipo y creyendo en ellos mismos. Yo confío mucho en todos los que formamos este equipo».