La polvareda levantada en los últimos días desde el Club de Pádel ha surtido efecto, al menos de palabra. Después de una asamblea extraordinaria donde el presidente de la entidad, Miguel Sánchez, narró con todo detalle los compromisos adquiridos e incumplidos por parte del equipo de gobierno y la problemática que atañe a las pistas -insuficiencia de las mismas y mal estado y orientación de las cuatro existentes-, de cruces de declaraciones vía medios de comunicación y redes sociales y de la intervención de Sánchez en el pleno, la historia se ha saldado con un acuerdo entre ambas partes.

El acuerdo, según informa el Ayuntamiento, contempla el compromiso para «iniciar los trámites y autorizaciones técnicas correspondientes para la creación de una nueva pista de pádel en la Ciudad Deportiva, así como el cambio de la superficie de las cuatro pistas actuales y las mejoras necesarias en el césped». La parte de cubrir alguna pista quedaría para futuros años ya que no se contempla en el acuerdo que se alcanzó en el día de ayer. Todo ello, se supone, en el presente año. Problema resuelto y todas las partes contentas.

Sin embargo, hay más fondo. La cuestión fundamental la expuso el concejal del PSOE Bartolomé Cruz en la pasada sesión ordinaria cuando se dirigió al concejal de Deportes, Pedro García, para recordarle que en el presupuesto aprobado en ese mismo salón se incluyó una partida de 100.000 euros para varias actuaciones en materia deportiva que hasta la fecha no se ha ejecutado para los fines indicados. «Para otros deportes sí hay partidas, os pedimos que cuando hagáis vuestros presupuestos los penséis, los planifiquéis y tenéis que cumplir con ello. Si se improvisa la gente se acaba frustrando», indicó Cruz.

Y la cuestión es esa, si había 100.000 euros destinados a la cubierta exterior del Pabellón Juan Sepúlveda y al arreglo de las pistas de pádel, ¿por qué ninguna de las dos actuaciones se ha realizado? La primera ha quedado descartada y la segunda parece que seguirá tras las presiones realizadas desde el Club de Pádel. ¿De qué vale entonces un presupuesto? El argumento que ahora se utiliza de que la cubierta se dispara de los 100.000 euros parece poco válido si aplicamos la lógica y esa nos conduce a pensar que cuando uno defiende un presupuesto ha pedido, de una manera aproximada, el coste de las inversiones planteadas. O eso o se establecen partidas para contentar al personal hasta que la paciencia se agote y eso es lo que les ha ocurrido a los representantes y socios del Club de Pádel.

Acuerdo alcanzado, se ha echado en falta en estos días que fuera el concejal de Deportes el encargado de dar las explicaciones pertinentes. Lo hizo ante los medios de comunicación hace algo más de una semana, pero no dio ese paso el lunes en el salón de plenos y fue el alcalde, Santiago Cabello, el que dio las explicaciones pertinentes. Ayer volvió a ocurrir lo mismo y el anuncio de lo pactado lo realizó el primer teniente alcalde, Emiliano Pozuelo. Otra vez la lógica va por un camino que no es paralelo al de la realidad.