En la intimidad que otorga la capilla de Nuestro Padre Jesús Nazareno. Así se ha vivido la madrugá pozoalbense con la Cofradía de Soldados Romanos y Penitentes Sayones de Nuestro Padre Jesús Nazareno realizando el acto del prendimiento y la sentencia de Poncio Pilato en el interior de la capilla ya que la lluvia impidió que la cofradía pudiera salir a la calle.