El Casa Rural Abuela Teo de Pozoblanco consiguió su primer punto en lo que va de liga frente a un rival que llegaba a su enfrentamiento contra los de Juan Carlos Blanco habiendo ganado todos sus partidos, el Xerez. Un empate importante, lejos del Juan Sepúlveda, en un partido donde los pozoalbenses volvieron a demostrar que aún les cuesta hacer gol.

La primera parte del choque fue mala y ambos equipos estuvieron espesos en ataque cometiendo muchos errores en las entregas. A pesar de que apenas hubo ocasiones de gol, fue el cuadro visitante el primero que lo intentó por medio de Caro con un disparo a la salida de un córner que despejó el portero local. Poco después, llegaron los disparos de los gaditanos Paquito y Carrasco que quedaron en nada.

El primer gol del primer acto llegó en el la recta final de la misma, tras un tiempo muerto solicitado por Juan Carlos Blanco. Caro sacó de banda en corto para que Tete realizara un disparo a portería sin que el cancerbero se quedara con el esférico algo que aprovechó Lito para meter el pie y marcar el 0-1.

El empate llegaría en la segunda mitad, en la primera jugada de la misma, después de una buena circulación de balón de los locales que terminó con Paquito consiguiendo el 1-1. Este segundo acto fue mucho más entretenido y los dos equipos tuvieron ocasiones de hacer goles, adelantándose por segunda vez los pozoalbenses tras una falta botada por Rafa Dueñas que da en el muslo de Rafita lo suficiente para desviar la trayectoria del balón y marcar.

Como sucediera la semana pasada, el Casa Rural Abuela Teo no supo retener esa diferencia a su favor y dos minutos más tarde, tras ser castigado injustamente con una nueva falta, vio como Kiko transformaba un doble penalti que venía a poner el 2-2 definitivo. Buen empate pero la victoria se le sigue resistiendo a los pozoalbenses.