El encendido de las luces navideñas llegó a Pozoblanco en la tarde del viernes con una importante asistencia de gente que no se quiso perder un momento que no se pudo vivir el año pasado. La ciudadanía se concentró en la Avenida Villanueva de Córdoba donde se encendió el tradicional árbol y desde donde llegaron los fuegos artificiales. 

El recorrido condujo, posteriormente, a otras localizaciones donde el alumbrado adquiere protagonismo. Es el caso de la Plaza de la Iglesia de Santa Catalina donde el «jardincito» presenta un alumbrado diferente con respecto a años anteriores diciendo adiós a los Reyes Magos y dando la bienvenida a cubos de colores y a una gran bola navideña que fue el centro de las primeras fotografías. 

La ciudadanía pozolbense visitó las diferentes zonas para conocer la iluminación y vivir el primer día señalado en la Navidad de un año donde se quieren recuperar las emociones dejadas atrás por las restricciones del Covid-19.