Los compañeros del veterinario agredido en el día de ayer en la Oficina Comarcal Agraria (OCA) Pedroches I han mostrado su condena ante la agresión a las puertas de la oficina a las 10:30 horas de la mañana. Un parón en el que también ha estado el delegado de Agricultura, Francisco Zurera, que ha mostrado su apoyo a todos los trabajadores después de haber mantenido una reunión con los mismos donde «he querido saber lo ocurrido, los problemas y necesidades que tienen».

Zurera ha mostrado su «más sincera repulsa porque en un estado democrático la seguridad de un trabajador no tiene por qué estar en peligro y sin embargo ayer sucedieron hechos muy graves con una agresión a un empleado público». El delegado ha indicado que «no hay justificación posible» y ha catalogado la agresión de «hecho aislado».

En este sentido, Zurera ha respetado el escrito remitido desde el Sindicato Andaluz de Funcionarios donde se criticaba que no se hubieran puesto medidas de seguridad tras la agresión sufrida en el mes de julio. «Lo respeto pero no estoy de acuerdo, aunque pueden llevar parte de razón porque en la zona hay una problemática sobre la que estamos trabajando, pero no es algo esperado porque en los últimos 10-15 años, ¿cuántas agresiones de este tipo se han producido? Ninguna», ha manifestado.

Con todo, la policía autonómica se ha traslado durante el día de hoy a la OCA de Pozoblanco donde permanecerá durante toda la jornada y probablemente también en los próximos días se mandarán efectivos. Además, Zurera ha asegurado que «vamos a sumar una vigilancia con un guarda jurado de prevención unos días en la Oficina de Pozoblanco». Por último, el delegado también ha informado que la Junta baraja presentarse como acusación en el proceso contra los ganaderos que agredieron al veterinario y no supo indicar si habían sido detenidos.